Irma, Katia y José amenazan el suministro de gasolina y petróleo en América Latina
viernes, 8 de septiembre de 2017
Katia en su paso por el noreste de México representa un riesgo para las embarcaciones de petróleo de Estados Unidos, cuyo destino son las refinerías texanas.
Valentina Mugno P.
El Atlántico es nuevamente el escenario de la temporada de tormentas tropicales. Desde 2010 no se veía la formación simultánea de tres huracanes que en esa ocasión se llamaron Igor, Julia y Karl, y tuvieron en promedio vientos demás de 200 kilómetros por hora. Este año, a dos semanas del desastre que dejó Harvey en Texas, calculado en US$100.000 millones, se suma el que se prevé que traerán Irma (más de US$130.000 millones) y Katia, además de José, que según cálculos de Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, ya pasó de una intensidad de escala tres a escala cinco.
Katia en su paso por el noreste de México representa un riesgo para las embarcaciones de petróleo de Estados Unidos, cuyo destino son las refinerías texanas en el Golfo de México, al igual que Irma, pues cierran el acceso al paso del cargamento hacia y desde Texas y Louisina. “El impacto va a ser menor que con Harvey en las refinerías, pues en este caso se da una afección, más que por producción, por el transporte de crudos. La salida y entrada de refinerías en Houston y Nueva Orleans tienen limitantes para la entrada y salida del Golfo, eso trastornará el transporte de petróleo y sus derivados”, indicó Camilo Silva, socio fundador de Valora Inversiones.
Con el huracán Irma se han cerrado terminales petroleras en el norte del Caribe, una situación que empeora el panorama de escasez en el suministro de combustible para los países de América Latina. Lo anterior se debe a que el huracán Harvey, que impactó las costas de Texas hace dos semanas, interrumpió los envíos desde esa costa. De acuerdo con Reuters, hay más de 100 millones de barriles en capacidad de almacenamiento en el Caribe, que son importantes para la región debido a la limitada capacidad de refinación de crudo. Asimismo, estos barriles actúan como suministro para naciones sudamericanas como Brasil, Venezuela y Colombia. “Lo que produce Colombia es para consumo en el país, lo mismo ocurre en Venezuela y México”, agregó Silva.
La agencia reportó que América Latina ha presentado problemas durante las dos semanas posteriores a Harvey para tener cargamentos, puesto que las refinerías en esa zona aún no se han recuperado de las inundaciones causadas por las fuertes lluvias que llegaron con la tormenta. Hasta el momento, las grandes compañías de la zona están reiniciando operaciones. Entre ellas están ExxonMobil que ya retomó sus instalaciones en Baytown, y Valero Energy, que inició los procesos de refinación en Corpus Christi y en la ciudad de Texas. Sin embargo, la planta con la mayor capacidad (600.000 bdp), Motiva, sigue en reparaciones.
La Administración de Información Energética (EIA, por sus siglas en inglés) expuso el paso de los tres huracanes y, en el trayecto estimado de José aún no se ven indicios de que pueda haber una incidencia en tierra.
Sin embargo, de hacerlo puede afectar las refinerías ubicadas en el estado de Nueva York y la salida de productos petroleros por el puerto. Esto llevaría a que la producción de crudo en Estados Unidos caiga tras su recuperación. Y es que en 12 meses, según los cálculos de Valora Inversiones, esta tuvo un aumento en 759.000 barriles, pero debido a Harvey cayeron a más de 749.000 bdp en una semana.
Cuba cierra poducción de níquel por Irma
Como método de prevención contra los efectos que tenga el huracán Irma en Cuba, el Gobierno decidió cerrar su industria de níquel, al concluir las operaciones de la planta Ernesto Che Guevara. Por su parte, la minera Sherritt Joe Racanelli mantiene operaciones en capacidad mínima. “Seguimos monitoreando la situación y comenzando a cerrar las operaciones hasta que pase la tormenta”, indicó un portavoz.