Javier Milei propone reunirse con su par, Lula da Silva tras propinarse ofensas mutuas
miércoles, 17 de abril de 2024
El mandatario argentino parece querer una tregua con el Presidente de Brasil al manifestar sus intenciones por discutir sus diferencias en persona
Bloomberg
El presidente de Argentina, Javier Milei, presentó una ofrenda de paz a su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, a quien calificó en reiteradas oportunidades de “comunista”. Propuso un encuentro para descongelar las relaciones de alto nivel entre los países vecinos.
En un viaje a Brasilia y São Paulo esta semana, la canciller argentina, Diana Mondino, entregó personalmente una carta al equipo de Lula con la invitación, en la que no se fija fecha ni lugar para la reunión informal, según funcionarios de ambos Gobiernos familiarizados con el texto.
Lula tiene intención de esperar hasta que el encuentro se produzca de forma natural, añadió el funcionario brasileño. Ambas fuentes solicitaron el anonimato.
Antes de asumir el cargo en diciembre, Milei cuestionó si Argentina mantendría relaciones con su mayor socio comercial después de tildar a Lula de “comunista con quien no trataría”. El líder brasileño decidió entonces ignorar a Milei, no asistió a su toma de posesión en diciembre y esperó mayor claridad sobre el plan de la Administración entrante frente a Brasil.
Si bien los presidentes nunca se han reunido, las relaciones comerciales entre las dos economías más grandes de Sudamérica continuaron como de costumbre. Gran parte de eso puede atribuirse al trabajo de Mondino, quien fue a Brasilia incluso antes de la posesión de Milei para aliviar las tensiones causadas por su retórica. Desde entonces, ha asegurado que Argentina no solo quiere mantener los lazos comerciales con Brasil, sino profundizarlos.
Lula y Milei representan modelos económicos radicalmente diferentes y no han tenido pelos en la lengua a la hora de criticarse mutuamente. Mientras Milei, un autodenominado anarcocapitalista, se ha comprometido a privatizar empresas públicas y despedir a decenas de miles de empleados estatales, Lula ha tratado de aumentar el gasto público y revitalizar las empresas estatales.
Sin duda, Lula ha expresado su voluntad de superar sus diferencias, diciendo que no necesita ser “amigo” de otros presidentes para trabajar con ellos. Los dos se reunirán en la cumbre del Grupo de los 20 en Río de Janeiro más adelante en el año, donde Lula será anfitrión.