Kamala Harris enfrentará a Donald Trump tras recibir nominación de los demócratas

La vicepresidente de Estados Unidos, Kamala Harris logró los suficientes votos de los delegados del Partido Demócrata para ganar la nominación en su carrera a la Casa Blanca. La noticia la confirmó la presidente del partido, Jaime Harrison, quien incluso resaltó que se haya oficializado su candidatura antes de la convención del 19 de agosto.

Harris se convertirá en la primera mujer afro y de origen asiático en liderar una candidatura de un partido importante en EE.UU. Con la confirmación de la nominación se hace totalmente oficial que competirá por la Presidencia contra el republicano, Donald Trump.

Insultos y ataques de Trump

Trump completa una última semana en la que ha visto el aumento de la popularidad de Harris en las encuestas, y ha tenido pasos en falso y ataques directos a ella. Incluso, se metió en el tema de Venezuela y la insultó al decirle "loca" y culparla por reducir las sanciones al régimen de Nicolás Maduro.

El republicano desestimó las presiones para debatir con la vicepresidenta Kamala Harris. “Bueno, yo quiero”, dijo Trump el viernes en el programa Mornings with Maria de la cadena Fox Business. “Ahora mismo digo: '¿Por qué debería hacer un debate? Estoy liderando las encuestas y todo el mundo la conoce, todo el mundo me conoce”.

La campaña de Harris ha insistido para que Trump lleve a cabo un debate el 10 de septiembre, el cual ya se había programado con Joe Biden, presentado por ABC News. En el primer debate de Trump con Biden, el presidente tuvo un pésimo desempeño que finalmente lo llevó a poner fin a su candidatura a la reelección y apoyar a Harris.

La campaña de Trump ha tenido que cambiar de estrategia ahora que se enfrenta a un nuevo adversario a solo tres meses de las elecciones. Harris ha dinamizado a los demócratas, incluidos bloques clave como los votantes afro y los jóvenes, lo que ha reducido la ventaja del republicano en las encuestas y la llevó a superarlo en la recaudación de fondos.

La estrategia de Trump de citar las encuestas para eludir los debates es una que utilizó durante la contienda de las primarias republicanas, donde se negó a subir al escenario con sus rivales, programando regularmente un evento a la misma hora.