Globoeconomía

La Bolsa de Atenas sufre otra desbandada en sus bancos

Expansión - Madrid

Ni las restricciones impuestas a los inversores griegos ni el hecho de que ayer cerrara con su mayor caída de la historia, un 16%, impiden un nuevo predominio de los números rojos en la Bolsa de Atenas.

Los descensos, en todo caso, se moderan por debajo incluso del 2%, lejos del 23% de desplome que llegó a registrar en la sesión de ayer, cuando regresó a la actividad después de permanecer cerrada más de un mes, desde el pasado 29 de junio.

La banca, casi el único gran lastre

La Bolsa de Atenas vuelve a sufrir el lastre de la banca. En la apertura de la jornada National Bank of Greece, Piraeus Bank, Eurobank y Alpha Bank, los cuatro grandes bancos, cotizan por segunda jornada consecutiva con descalabros próximos de nuevo al 30%, el límite máximo de caída permitido.

La desbandada inversora de la banca griega empaña la 'tregua' que presenta el resto de los sectores cotizados en la Bolsa de Atenas. La mejora es especialmente significativa entre valores ligados al turismo, como la aerolínea Aegean Airlines.

Toda las alertas se concentran en el sector financiero. Este fin de semana la prensa griega publicaba que el Gobierno de Atenas podría pedir US$26.322 millones en un primer tramo de rescate a los acreedores internacionales en el mes de agosto.

El primer tramo de US$26.717 millones sería utilizado, entre otros fines, para canalizar 10.000 millones como una recapitalización inicial para los bancos griegos y US$3.509 millones para los bonos griegos retenidos por el BCE y otros pagos.

Pero la cifra de US$10.967 millones para recapitalizar los bancos podría ser insuficiente, y después de la reciente desbandada de los inversores los bancos griegos podrían pedir hasta US$27.419 millones de euros para sanear sus balances.

Veto a los bajistas

La mayor tregua que traslada hoy la Bolsa de Atenas, con la excepción destacada de los bancos, podría abrir la puerta a un adelanto en el fin del veto impuesto a los inversores bajistas.

Las autoridades griegas tienen previsto mantener las restricciones a las posiciones cortas hasta finales de agosto, si bien reconocen que podrían adelantar el fin de este veto si las condiciones del mercado se normalizan.