La Casa Blanca cumple sus amenazas y despidió a miles de empleados gubernamentales
viernes, 10 de octubre de 2025
Miles de personas han perdido su empleo como resultado del cierre, según un alto funcionario de la Casa Blanca, aunque el alcance de los recortes aún no está claro
Bloomberg
La Casa Blanca afirmó que está cumpliendo sus advertencias de despedir a miles de empleados federales en medio del cierre del gobierno, que ya entra en su décimo día, con recortes en agencias como los Departamentos de Salud y Servicios Humanos (HHS), Seguridad Nacional (DHS) y Comercio.
“Los RIF han comenzado”, publicó el viernes en redes sociales el director de presupuesto de la Casa Blanca, Russell Vought, usando el término del gobierno federal para referirse a despidos masivos. Miles de personas han perdido su empleo como resultado del cierre, según un alto funcionario de la Casa Blanca, aunque el alcance de los recortes aún no está claro.
Sindicatos que representan a cientos de miles de empleados federales pidieron el viernes a un juez que detuviera de inmediato los despidos. La solicitud de emergencia presentada ante un tribunal federal en San Francisco busca impedir que la Oficina de Administración y Presupuesto ordene ejecutar los despidos y evitar que las agencias envíen notificaciones antes de la audiencia del 16 de octubre.
Empleados del HHS figuran entre los afectados, según el portavoz Andrew Nixon, mientras que Tricia McLaughlin confirmó que también hay trabajadores del DHS. Un funcionario estadounidense indicó que el Departamento de Comercio también despidos.
Los ceses marcan la primera ola de despidos a gran escala de empleados federales durante una interrupción de financiamiento en la historia moderna, sobrepasando a las licencias temporales que caracterizaron cierres previos. La medida eleva la tensión en el enfrentamiento con los demócratas por los subsidios de salud y la financiación del gobierno.
El líder de la mayoría en el Senado, John Thune, responsabilizó a los demócratas. “Durante diez días, la Casa Blanca ha esperado que los demócratas del Senado recapaciten y hagan lo correcto: financiar el gobierno”, dijo antes del anuncio de los despidos.
Susan Collins, líder republicana del comité de asignaciones del Senado, se convirtió en la primera de su partido en oponerse públicamente a los pasos de Vought, aunque mantuvo que la culpa del cierre recae en los demócratas. “Los despidos arbitrarios generan falta de personal para cumplir las misiones de las agencias y perjudican a las familias en Maine y en todo el país”, señaló en un comunicado.
Los demócratas sostienen que gastar dinero en despidos durante un cierre es ilegal. El líder de la minoría en el Senado, , calificó las acciones como un ataque deliberado contra los trabajadores estadounidenses que “siembran el caos”. “Seamos claros: nadie obliga a Trump y a Vought a hacerlo”, dijo Schumer. “No tienen que hacerlo; quieren hacerlo”.
Los recortes se producen horas antes de la fecha límite para que el Departamento de Justicia presente un informe sobre cualquier plan de despidos durante el cierre. La audiencia está fijada para el 16 de octubre, en respuesta a la solicitud sindical para suspender las cesaciones. Más de dos tercios de los empleados civiles federales siguen trabajando —por ser esenciales o tener financiamiento prolongado—, mientras que el resto fue enviado a casa sin paga.
Los despidos del viernes representan el esfuerzo más reciente de Trump por intensificar el costo político del cierre en distritos demócratas mientras mantiene como “esenciales” sus prioridades. Horas después del inicio del cierre este mes, su administración suspendió US$18.000 millones en infraestructura en Nueva York, US$2.000 millones para transporte en Chicago y US$8.000 millones para proyectos de energía verde en 16 estados que votaron por Kamala Harris en las últimas elecciones.
En el Capitolio, las negociaciones bipartidistas continúan de forma intermitente, con algunos demócratas apoyando proyectos temporales de gasto. Sin embargo, los líderes de ambos partidos siguen divididos sobre si vincular la extensión de los subsidios del Obamacare a la reapertura del gobierno. Los demócratas advirtieron que las acciones de Vought harán más difícil un acuerdo, ya que la reversión de los despidos se convertirá en una exigencia clave para levantar el cierre.