Globoeconomía

La economía latinoamericana repuntará 1,3% este año

Noelia Cigüenza Riaño

De acuerdo con los cálculos de Fitch, este repunte estaría jalonado principalmente por el aumento de la demanda externa, una moderada alza de los precios de los productos básicos y el mejor desempeño de dos de los gigantes regionales: Argentina y Brasil, que empezarán de manera paulatina a sentir que su economía mejora y verán sus cifras en terreno positivo este año. Así, para Argentina se proyecta un crecimiento de 3,20% y en Brasil de 0,70%. 

De los cuatro países que conforman el bloque económico de la Alianza del Pacífico, Perú será la economía que más crezca, con una proyección de 3,5% para este año y de 3,8% para 2018. 

Le sigue como el segundo de mayor crecimiento del bloque comercial Colombia, en el que la entidad proyecta un crecimiento de 2,3% para este año y de 3,2% para 2018. 

En tercer lugar, estaría Chile cuya variación del PIB se ubicaría en 1,7% este año y en 2,4% en 2018. En estas proyecciones, la economía más rezagada del grupo sería México, en el que Fitch estima que crezca 1,5% este año pero 2,1% en 2018. 

Además, la calificadora indicó que varios bancos centrales de la región han comenzado a aliviar la política monetaria (en especial Brasil) a medida de que el problema de la inflación está disminuyendo y de que el impacto del efecto climático de El Niño ha mermado. 

Por el contrario, destaca que México ha estado apretando la política monetaria para controlar la inflación y las expectativas de la inflación frente a un peso débil y bastante volátil.

“La consolidación fiscal continúa enfrentándose a retos debido a un crecimiento débil y presiones de gasto continuas, mientras que la dinámica de la deuda sigue siendo adversa en numerosos países”, apuntó Fitch. 

Por otro lado, señaló que los mayores riesgos para el crecimiento de la región residen en un mayor proteccionismo comercial y controles de inmigración bajo la administración del magnate Donald Trump, una desaceleración de la economía China, una nueva caída en los precios de las materias primas y una financiación externa más estricta. 

En la actualidad, Fitch tiene a seis naciones latinoamericanas bajo un panorama “negativo” en la calificación de sus deudas soberanas, entre los que sobresalen México y Chile por el cambio de sus perspectivas desde “estable”. 

Para Colombia, cambió su perspectiva de negativa a estable hace un mes gracias a una reducción en los desbalances macroeconómicos, a la desaparición de la incertidumbre que había alrededor de las cuentas fiscales del país y a la expectativa de que la inflación converja hacia la meta del Banco de la República. “Esperamos que el Gobierno cumpla con su meta del déficit fiscal debido a la reforma tributaria que aprobó a finales de 2016”, apuntó la compañía.