Los autos Mercedes son más rentables que nunca en medio de la escasez de chips

Los vehículos Mercedes-Benz AG son más rentables que nunca después de que la crisis de los chips provocara una escasez mundial de automóviles, lo que impulsó los precios de venta de modelos como el buque insignia Clase S.

El fabricante de automóviles superó su objetivo de rentabilidad el año pasado y el rendimiento de las ventas en el último trimestre fue el más alto registrado, dijo un portavoz el viernes.

La escasez mundial de componentes de alta tecnología ha afectado a la industria, lo que ha provocado paradas y retrasos en la producción. Volkswagen Group informó el viernes que las entregas en todo el mundo disminuyeron un 15% en enero, y Volvo Car AB dijo que las tensiones en la cadena de suministro continuarán interrumpiendo las entregas este año.

Aún así, Mercedes-Benz, que perdió la corona de ventas de vehículos de lujo ante su rival BMW AG por primera vez desde 2015, dijo que los menores volúmenes de ventas fueron más que compensados ​​​​por el aumento de los precios el año pasado, ya que la compañía se benefició de la escasez de vehículos terminados. y una estrategia que dirigió chips escasos a modelos de mayor valor.

La escasez de chips ha llevado a inversiones dramáticas de precios, por lo que algunos modelos usados ​​cuestan significativamente más que pedir otros nuevos, y estos últimos están sujetos a largas demoras. Las versiones usadas del icónico Mercedes G-Wagon se venden por alrededor de un tercio más que las nuevas en los EE. UU., según la firma de investigación de mercado iSeeCars.

La gerencia de Mercedes-Benz está intensificando los esfuerzos para transformar uno de los nombres más famosos en la fabricación de automóviles en un rival totalmente eléctrico del líder del mercado Tesla Inc. La compañía apunta a tener modelos alimentados por batería en todos sus segmentos este año, un escenario para su ambición de vender solo autos eléctricos para 2030.

La compañía anteriormente conocida como Daimler AG escindió su división de camiones en diciembre, poniendo fin a más de un siglo de negocios funcionando bajo un mismo techo. La medida tiene como objetivo permitir que las empresas intensifiquen el enfoque en los cambios tecnológicos radicales que afectan a sus respectivos segmentos.

La compañía dijo que los retornos ajustados sobre las ventas en su segmento de automóviles y camionetas alcanzaron el 12,7%, superando la guía para un resultado en un rango de 10% a 12%. Los fuertes precios de vehículos nuevos y usados ​​ayudaron a lograr el resultado, dijo la compañía.

Las ganancias ajustadas antes de intereses e impuestos en la división llegaron a alrededor de 14.000 millones de euros (16.000 millones de dólares) para todo el año. Las acciones subieron hasta un 3,4% tras la noticia.

Mercedes-Benz dijo que ahora espera que la medida de reestructuración impulse el Ebit del grupo entre 9.000 y 10.000 millones de euros. Este efecto único no tiene impacto en el flujo de efectivo ni un impacto material en los impuestos, dijo el fabricante de automóviles, y agregó que estaría excluido de determinar el dividendo para los accionistas.