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Los ejércitos de Estados Unidos y de Venezuela se encuentran ahora en extremos

La tensión entre Estados unidos y Venezuela escaló al terreno militar. Mientras Washington desplegó buques en el Caribe, Caracas respondió con un llamado a la Milicia

Alejandra Rico Muñoz

La relación entre Estados Unidos y Venezuela atraviesa uno de sus momentos más delicados en los últimos años. Las tensiones diplomáticas se han trasladado ahora al plano militar, alimentadas por el reciente despliegue de tropas y embarcaciones estadounidenses en aguas del mar Caribe. En Caracas, el gobierno no ha tardado en reaccionar: en los últimos días, decenas de ciudadanos decidieron enlistarse en la Milicia Bolivariana.

Theodore Kahn, director para la región Andina de Control Risks, explicó que esta estrategia “es una característica muchas veces de los regímenes autoritarios, porque al usar este tipo de fuerzas irregulares o de civiles, se permite escaparse de las limitaciones que implican el derecho internacional y los marcos constitucionales que regulan el uso de las fuerzas militares dentro del ámbito nacional”.

El movimiento responde al temor de una eventual invasión por parte de Washington, un escenario que, aunque no está confirmado, se alimenta con la llegada a las costas Venezolanas de los buques enviados por Donald Trump.

Y es que si se comparan los ejércitos, el de Estados Unidos tiene todas las de ganar, no solo contra Venezuela, sino en el mundo entero, pues lidera la lista con un índice de 0,07, considerado el ejército más fuerte del mundo, gracias a su capacidad tecnológica, su alcance global y su superioridad financiera. Le siguen de cerca Rusia y China, ambos con 0,08, que se consolidan como los principales contrapesos estratégicos en el escenario internacional, según el GFP Index.

En contraste, Venezuela figura en el puesto 50 con un puntaje de 0,89, lo que refleja su rezago frente a las grandes potencias. La diferencia es contundente, mientras Washington concentra el armamento más sofisticado y una capacidad de despliegue en cualquier punto del planeta, Caracas enfrenta limitaciones presupuestarias, tecnológicas y logísticas que la dejan muy por debajo en la clasificación. El informe no solo muestra la correlación de fuerzas en términos militares, sino también la magnitud del desafío que enfrentan países como Venezuela al intentar proyectar, con ese tipo de estrategias, poder en un escenario internacional dominado por ejércitos con recursos prácticamente ilimitados.

No obstante, a pesar de tener el mayor ejército, necesitará más que los buques que envió a las costas, si quisiera entrar a Venezuela. “Estados Unidos tiene una fuerza armada descomunal y lista para actuar en Venezuela, pero eso no es suficiente para deponer al dictador Maduro. Políticamente, la exigencia mayor, no solo para el presidente Trump, sino para el secretario de Estado y consejero de Seguridad Nacional, Marco Rubio, es que sea una operación limpia y muy rápida. Eso significa, con la mínima cantidad posible de bajas, en caso de que llegara a haber la determinación de actuar. Hay, además, un número amplio de incógnitas que requieren ser despejadas, como, por ejemplo, si Estados Unidos cuenta con aliados dentro de las propias Fuerzas Armadas venezolanas que estén planeando la caída de Maduro”, explicó John Mario González, analista político.

Composición de EE.UU.

Estados Unidos mantiene su posición como la mayor potencia militar del planeta gracias a un equilibrio sólido entre sus diferentes capacidades estratégicas. De acuerdo con el índice, el país presenta un desempeño robusto en todos los frentes de la defensa, con especial fortaleza en el poder terrestre y aéreo.

El poder aéreo es uno de los sectores mejor desarrollados, respaldado por una flota de aviones de combate, bombarderos y drones que le otorgan la posibilidad de proyectar fuerza en cualquier punto del planeta. A esto se suma el poder terrestre, que refleja el número y la calidad de tanques, vehículos blindados y artillería pesada, conformando un bloque estratégico de gran alcance.

LOS CONTRASTES

  • Theodore KahnDirector para la región Andina de Control Risks

    “Venezuela, al usar este tipo de fuerzas irregulares o de civiles, se permite escapar de las limitaciones que implican derecho internacional y marcos constitucionales”.

  • John Mario GonzálezAnalista político

    “Estados Unidos tiene una fuerza armada descomunal y lista para actuar en Venezuela, pero eso no es suficiente para deponer al dictador Nicolás Maduro”.

Por otro lado, el personal militar y el poder naval completan el cuadro con cifras que, si bien no superan a los dos primeros componentes, se mantienen en niveles altos y garantizan la capacidad de respuesta inmediata frente a eventuales amenazas.

Por último, el componente de recursos financieros subraya un punto decisivo: la superioridad militar estadounidense no solo depende de su infraestructura bélica, sino también de los recursos económicos que permiten sostener operaciones, modernizar equipos y mantener un despliegue activo en varias regiones del mundo.

A diferencia de potencias como Estados Unidos, el perfil militar de Venezuela refleja una estructura menos equilibrada y más dependiente de ciertas áreas estratégicas. Según los indicadores, el país sudamericano presenta un mayor peso relativo en el personal militar, que constituye su principal fortaleza, mientras que otros rubros como el poder naval muestran niveles considerablemente más bajos.

El poder terrestre, con presencia de tanques, artillería y vehículos blindados, se mantiene en una franja intermedia que refuerza la capacidad defensiva en el ámbito regional, pero sin alcance significativo en el plano internacional. De manera similar, el poder aéreo muestra un desarrollo limitado frente a las principales potencias, lo que reduce la proyección operativa fuera de sus fronteras. En paralelo, los indicadores de recursos financieros para sostener operaciones reflejan restricciones económicas, coherentes con el prolongado deterioro de la economía venezolana. Estas limitaciones afectan directamente la modernización de equipos, el mantenimiento de unidades y la capacidad de desplegar fuerzas en escenarios prolongados.

Así, el perfil de Venezuela en términos de defensa muestra un énfasis en la cantidad de soldados y en una capacidad terrestre básica, pero con debilidades notorias en el poder naval, aéreo y financiero. Esto deja al país en una posición de desventaja frente a potencias globales y, en muchos casos, incluso frente a sus pares regionales.

Aumentarán el despliegue militar en frontera con Colombia

Diosdado Cabello, ministro de Interior de Venezuela, informó mediante televisión abierta del país que el presidente Nicolás Maduro aumentará su despliegue militar en la frontera con Colombia con 15.000 hombres, drones, refuerzos fluviales y aéreos. “Pedimos al gobierno colombiano, quien ha estado colaborando, que haga lo propio para asegurar la paz en todo el eje, para desalojar a quien quiera radicarse para cometer delitos en la zona de la frontera”, aseguró en su intervención.

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