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Los escándalos y la recesión económica afectan la popularidad de Michel Temer

Reuters

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Temer asumió el cargo en mayo, tras el inicio de un proceso de juicio político que concluyó en agosto con la destitución de la presidenta Dilma Rousseff, con la promesa de limpiar el gobierno y reactivar la estancada economía. Pero las drásticas medidas de austeridad que impulsó en el Congreso, junto con acusaciones de corrupción que forzaron la renuncia de varios miembros importantes de su gabinete y su partido, amenazan su supervivencia política.

La encuestadora Ibope dijo que el número de personas que considera que el gobierno de Temer es “malo” o “terrible” subió a 46% desde 39% en la encuesta previa, divulgada el 4 de octubre y realizada seis semanas después de que Temer reemplazara definitivamente a Rousseff.

La proporción de aquellos que creen que el gobierno de Temer es “grandioso” o “bueno” bajó a 13% desde 14% del sondeo previo. La desaprobación a la manera en que Temer está gobernando subió de 55% a 64% de los participantes de la encuesta. 

El estudio de Ibope consultó a 2.002 personas entre el 1 y el 4 de diciembre.