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Los mayores logros y las asignaturas pendientes de Draghi tras dos años al frente del BCE

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"Haré todo lo necesario... y créanme, será suficiente", ha sido la frase más importante pronunciada hasta ahora por Mario Draghi, que hoy cumple dos años al frente de la principal institución monetaria europea. Este aniversario deja un puñado de logros, pero también algunas tareas pendientes como su gran prueba de fuego: el supervisor bancario único, y ahora una nueva bajada de tipos que controle la inflación.

Tal día como hoy hace justo dos años, la incertidumbre económica y financiera era evidente. Un pequeño repaso a los datos que se manejaban entonces, da muestra de lo diferente que era la situación. En España, el Ibex luchaba por aferrarse a los 9.000 puntos, la prima de riesgo superaba los 350 puntos básicos y la rentabilidad de la deuda española el 6,1%.

Además, la divisa comunitaria se cambiaba por US$1,40 y el barril de Brent por US$110. Pero en el legado que Jean-Claude Trichet, el anterior presidente del Banco Central Europeo (BCE), dejó a Súper Mario, se encontraban también unos tipos de interés en el 1,5%. Los expertos consultados por Expansión.com aplauden su labor durante estos dos años al frente del BCE y destacan sus logros, pero también se fijan en cuáles son ahora sus asignaturas pendientes.

Logros
1. Del control de la inflación a la estabilidad financiera El BCE tiene como objetivo primordial el control de precios para que la inflación esté en el entorno del 2% y cuando sube o baja los tipos de interés, lo hace en función de esas presiones al alza o a la baja sobre ellos. Pero, ¿de qué sirve controlar la inflación si falla la estabilidad financiera? Esa debe ser la pregunta que se hizo Draghi al asumir su cargo.

La mayor parte de los expertos consultados coinciden al afirmar que "Draghi ha conseguido algo más que borrar la imagen de banquero central europeo obsesionado por la inflación", como indica Marian Fernández, directora de estrategia de Inversis Banco. Roberto Ruiz-Scholtes, director de estrategia de UBS, se atreve incluso a decir que "ha desplazado el foco del BCE del control de la inflación a la estabilidad financiera, y ha multiplicado los instrumentos de política monetaria desde el mero tipo de interés hacia medidas cuantitativas, expandiendo además el rango de colaterales aceptados".

Una opinión que coincide con la de Estefanía Ponte, directora de análisis y estrategia de Cortal Consors, que señala que Draghi "ha roto con la tradición de decisiones de política monetaria tan solo en función de la inflación. Desde que se pusiera al frente del BCE, mostró una mentalidad más abierta en cuanto a las condiciones que pudieran requerir nuevas medidas de política monetaria".

2. Bajar tipos del 1,5% al 0,5% Para controlar la inflación, el BCE cuenta con múltiples herramientas. Los tipos de interés han sido históricamente la más potente, de ahí que durante estos dos años Draghi haya acometido cuatro bajadas del precio oficial del dinero con el objetivo de apoyar la recuperación económica. Pero su primer logro fue "insuflar un soplo de aire nuevo en 2011 cuando el BCE se equivocó al subir los tipos hasta el 1,50%.

En sus primeras dos reuniones recortó los tipos en 25 puntos básicos y los rebajó desde el 1,50% hasta el 1%, al tiempo que introdujo un discurso más pragmático, si bien desgraciadamente éste perdió fuerza posteriormente", apunta Francisco Vidal, economista para Europa de Intermoney. Ya en 2012 y posteriormente, este año, llegarían las dos siguientes bajadas que dejarían los tipos de interés en el 0,5%, el nivel más bajo de la historia del euro. Pero el descenso de la inflación que se conoció ayer, podría poner en la lista de tarea de Draghi una nueva bajada de tipos, como se explica más adelante.

3. Más flexible, más medidas extraordinarias Pero Mario Draghi no se ha conformado con el uso del clásico tipo de interés, sino que ha tirado de medidas extraordinarias, que le han conferido un carácter más flexible que a su antecesor. Esta ha sido una "etapa eminentemente positiva por la flexibilidad y heterodoxia con la que ha manejado la política monetaria del BCE. Draghi salvó la integridad de la zona euro con el OMT, cuyo mero anuncio logró frenar la huida de capitales desde la periferia. Y anteriormente extendió la barra libre de liquidez (LTRO) a 3 años para lograr, de facto, una expansión cuantitativa al comprar la banca periférica la deuda pública de los gobiernos con mayores problemas fiscales", indica Ruiz-Scholtes.

4. Generador de mantras A veces las acciones no son imprescindibles... como demostró el mero anuncio del a OMT. Lo más positivo que ha hecho Draghi durante su periplo a la cabeza del BCE fue "romper la espiral destructiva respecto a la ruptura del euro en julio del año pasado con sus famosas declaraciones de 'whatever it takes'", en palabras de Ángel Olea, director de inversiones de Abante. Y es que el ya famoso "créanme, haré todo lo que sea necesario para salvar el euro, y créanme, será suficiente", evitó que los inversores vivieran el agosto más tranquilo desde que estalló la crisis de las subprime en el verano de 2007. Pero a este mantra le siguió un año después: "los tipos permanecerán a estos niveles o inferiores durante un periodo extenso de tiempo". Por tanto, no hay duda de que otro de sus logros ha sido el de convertirse en "generador de mantras e instrumentos clave para el soporte y la recuperación de los mercados europeos", manifiesta Marian Fernández.

5. Mejor comunicación Completamente ligado al anterior logro está el hecho de haberse convertido en un excepcional comunicador y no sólo por su comparación con Trichet. Draghi ha sido capaz de "manejar mucho mejor la comunicación, hacer más con menos. Recordemos los efectos de sus mensajes en los que dejaba claro que el BCE haría todo lo necesario para salvaguardar la Eurozona o el lanzamiento del programa OMT que ha cumplido sus objetivos sin que sepamos sus detalles y se haya realizado una sola operación", explica el economista para Europa de Intermoney. Para Ponte, la directora de análisis y estrategia de Cortal Consors, sin duda, el mayor logro del banquero de origen italiano "ha sido el respeto por parte de los inversores.

El reflejo de lo anterior fue el anuncio del programa OMT. La determinación mostrada por Mario Draghi permitió una notable bajada de las primas de riesgo de los países periféricos, sin ni siquiera haber puesto en marcha el plan". Y es que además, a su aplaudida tarea como comunicador, se le atribuye el hecho de haber creado una especie de hoja de ruta del organismo monetario que preside, cuando en julio anunció tipos bajos por "un periodo prolongado".

Tareas pendientes
1. Volver a bajar tipos Pero no todo son aplausos... Ayer mismo, las grandes firmas de inversión cambiaron su visión y sus pronósticos sobre los tipos y añadieron una nueva asignatura pendiente al presidende del BCE. UBS, BNP Paribas, Nomura, RBS y JPMorgan descuentan ya una rebaja del precio oficial del dinero para que se controlen los bajos niveles de inflación. Lo hicieron después de que el dato de inflación interanual en la eurozona de octubre, bajara por sorpresa al 0,7%, desde al 1,1% registrado en septiembre, según las primeras estimaciones Eurostat, mientras que los expertos consultados por Bloomberg esperaban que la tasa se situara en el 1,1%. Por tanto, esta sería una nueva e imprevisible tarea pendiente del presidente del BCE.

2. Recuperar el pragmatismo Pero, entre sus grandes objetivos también se encontrarían "recuperar el pragmatismo y el tono de sus primeras reuniones y convertir al BCE en una institución proactiva, pues sigue yendo detrás de los acontecimientos. Draghi ha perdido la frescura de sus primeras reuniones y en Frankfurt, aunque se ha mejorado en la lectura del escenario de actividad, siguen alargándose mucho las decisiones y retrasándose medidas necesarias, un buen ejemplo es la reactivación del crédito a pymes, muchas expectativas y pocas acciones", según Francisco Vidal, de Intermoney.

3. Activar el crédito a pymes Está claro que los mercados reaccionan con las palabras, pero también necesitan hecho. "La mayor tarea pendiente del BCE es que vuelva a fluir el crédito en los países periféricos para las pequeñas y medianas compañías", opinan desde Abante, pero también desde Cortal Consors, donde apuntan que "la tarea pendiente es el nuevo paquete de medidas esperado. Medidas que se suponen ayudarán al crédito a las pymes, situación sobre la que Draghi ha mostrado su preocupación".

4. El BCE se dispone a asumir el papel de supervisor bancario Aunque no deja de ser un logro, el hecho de que el BCE se disponga a asumir el rol de supervisor bancario único, es una de sus principales tareas pendientes. Roberto Ruiz-Scholtes, de UBS, indica que Draghi "ha logrado un encaje con la EBA, permitiendo que los bancos de fuera de la zona euro entren también en la práctica en la nueva Unión Bancaria". En cualquier caso, desde esta casa de inversión, culminar la Unión Bancaria con el Mecanismo Único de Resolución y con el Fondo Europeo de Garantía de Depósitos, se encuentra entre sus deberes. Intermoney considera una "gran prueba de fuego" hacerse cargo de la supervisión bancaria "y demostrar que se hace bajo criterios de transparencia, promoviendo una lectura real de su situación.

Es decir, escapar de las decepciones anteriores, otras pruebas fallidas a la banca sería un gran fracaso y acabar con el papel del BCE como supervisor antes de comenzar". "Ahí está uno de sus retos: hacerlo bien, con equidad por países y oportunidad. Y en el corto plazo, se le exige el "más difícil todavía": revitalizar el crédito europeo", advierten en Inversis.

5. Dotar al BCE de un sesgo más heterodoxo Francisco Vidal, economista para Europa de Intermoney, considera que también será adecuado "dotar a nuestro banco central de un sesgo más heterodoxo y que en sus acciones prime menos Alemania y más el todo".

6. Asentar en el ordenamiento interno del BCE la proliferación de nuevos mecanismos Y, por último, desde UBS, apuntan que entre los deberes pendientes de Draghi no sólo figura el Mecanismo Único de Resolución, sino que también tiene que asentar en el ordenamiento interno del BCE la proliferación de nuevos mecanismos (en especial OMT y LTROs), para que puedan ser empleados en futuras crisis.