Los principales desafíos y oportunidades de las empresas a través del avance digital

En medio de un entorno económico complejo y con sociedades polarizadas, resulta todo un reto para las empresas generar competitividad en los sectores para cumplir con los objetivos medibles a corto y largo plazo. Así que, ¿cómo aprovechar los desafíos y transformarlos en oportunidades? ¿Cómo innovar y posicionar a las compañías mediante el uso acertado de las tecnologías?.

Para acercarnos a estas respuestas, las consultoras con experiencia en gestión de la reputación y asuntos públicos han lanzado informes en los que se abordan los desafíos, estrategias y soluciones de impacto para las compañías, con el fin de ajustar la cultura de una organización respecto a cada mercado y así dar cara al futuro asertivamente con creatividad y un foco decidido en los equipos de trabajo.

Entre los retos con mayor incidencia en el crecimiento empresarial se destaca el posicionamiento competitivo, que se puede lograr mediante el análisis de datos en el mercado, el cual aporta herramientas para predecir tendencias futuras, ayuda a estar preparados en cuanto a próximas contingencias y analizar la posibilidad de reforzar los mensajes o modificarlos.

Se trata de estimular el impacto en la comunidad, para ello, se debe participar de la conversación social y extraer insights en torno a las problemáticas para las estrategias comerciales, esto marcará la diferencia frente a la competencia.

El segundo reto es el ajuste de la estrategia de marketing, que incide en entender qué impacta realmente en las decisiones de compra de los consumidores. Por tanto, es importante implementar tecnologías que permitan activar los insights de los consumidores de forma personalizada y automatizada. Pues de nada sirve conocer las necesidades de los clientes si no se pueden activar.

Para la analista María del Pilar Esteve Herrera, el panorama digital ha llegado para quedarse por lo que la transformación ya no es una intención, es una necesidad.

El tercer reto es la hiperregulación del mercado, el sector empresarial ha encontrado su principal barrera en las normas que deberían resultar en incentivos. Esto significa que es necesario tener un papel proactivo en la formación de líderes y colaborar con los actores públicos para ser más escuchados y tenidos en cuenta en la elaboración de textos legislativos.

En cuarto lugar, esta la fidelización de clientes, para lo que se busca evolucionar la oferta de productos o servicios para satisfacer las cambiantes necesidades de estos tiempos. Por lo tanto, ofrecer programas de formación, y beneficios especiales es una forma efectiva de mantener el contacto con los clientes activamente. Esto como parte de los retos para digitalizar las empresas.