Francia

Macron y Scholz fueron derrotados por la extrema derecha en las elecciones de la UE

Gráfico LR

En Alemania, los socialdemócratas de Scholz lograron el peor resultado de su historia, quedando atrás tanto de la oposición conservadora

Bloomberg

El presidente francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Olaf Scholz sufrieron derrotas masivas en las elecciones al Parlamento Europeo del domingo,mientras los partidos de extrema derecha lograron avances que podrían influir en el bloque para adoptar una línea más dura en materia de migración y alterar acciones ambiciosas para proteger el clima.

A pesar de las derrotas a nivel nacional, los partidos de centro izquierda y centro derecha en toda Europa están listos para preservar su mayoría en las elecciones de toda la Unión Europea, que determinan la composición de la asamblea legislativa del bloque. Se proyectaba que el Partido Popular Europeo de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, terminaría primero, con 181 escaños.

En Francia, la Agrupación Nacional de Marine Le Pen ganó con 32% de los votos, en línea con las expectativas, mientras que el partido Renacimiento de Macron quedó atrás con 15%, según una encuesta publicada por Ifop. En Alemania, los socialdemócratas de Scholz lograron el peor resultado de su historia, quedando atrás tanto de la oposición conservadora como de la extrema derecha Alternativa para Alemania.

"El presidente no puede permanecer sordo al mensaje enviado por el pueblo francés", dijo a sus seguidores Jordan Bardella, líder de la Agrupación Nacional, después de que se anunciaran los resultados. "Le pedimos solemnemente que tome nota de esta nueva situación política, que vuelva al pueblo francés y organice nuevas elecciones legislativas".

Mientras las economías más grandes del bloque se enfrentan a una difícil control del poder interno, el resultado pone de relieve lo difícil que es para Europa encontrar un liderazgo claro para impulsar las principales políticas de la UE.

Las advertencias de Macron sobre el aumento del autoritarismo y el llamamiento a la unidad europea en el período previo a la votación no lograron impulsar su resultado, ya que las preocupaciones sobre la inflación, la seguridad y la inmigración hicieron aumentar el apoyo a Le Pen. Antes de la votación, presentó las elecciones como una lucha existencial para el continente y fundamental para la batalla de Ucrania contra Vladimir Putin.

La reputación del presidente francés como reformador y administrador de la economía también ha sufrido golpes en los últimos meses, con el gobierno obligado a buscar decenas de miles de millones de euros en ahorros después de que su déficit se disparó, y S&P Global Ratings rebajando la calificación crediticia del país.

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El grupo de centroderecha del PPE ganará, según la primera proyección para la formación del Parlamento Europeo, lo que le otorgará a él y a los Socialistas y Demócratas y a los Liberales un total combinado de 398 escaños de 720. Los Conservadores y Reformistas Europeos de extrema derecha, junto con la agrupación Identidad y Democracia, sumarán 133 escaños. Estaba previsto que los Verdes bajaran de 71 a 53 escaños.

La proyección se basa en estimaciones nacionales de 11 países y encuestas preelectorales para el resto.

Esos resultados significan que los principales puestos del bloque, incluidos los de presidente de la Comisión Europea y del Consejo Europeo, probablemente se repartirán entre líderes de los principales partidos. Eso podría conferir cierto grado de continuidad a políticas clave en un momento de inmensa incertidumbre geopolítica en la que la guerra de Rusia contra Ucrania hace estragos en el este y China se vuelve cada vez más asertiva.

La UE también se enfrenta a desafíos que incluyen cómo mantener la sostenibilidad fiscal invirtiendo al mismo tiempo en un futuro más verde, impulsando la competitividad de la industria manufacturera europea y fortaleciendo las capacidades de defensa en medio de la perspectiva del regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, que podría afectar a todo, desde el comercio hasta la política medioambiental. .

Alrededor de 360 ​​millones de personas tienen derecho a votar por los 720 legisladores que formarán parte de la asamblea de la UE durante los próximos cinco años. La mayoría de los 27 países miembros celebrarán sus votaciones el domingo y los resultados se conocerán a lo largo de la noche.

En Alemania, la alianza conservadora CDU/CSU iba camino de una cómoda victoria con 30%, seguida por el AfD con 16% y el SPD con 14%, según proyecciones de la emisora ​​pública ARD. Los otros dos partidos de la alianza gobernante de Scholz (los Verdes y los Demócratas Libres) también obtuvieron malos resultados, obteniendo 12% y 5% respectivamente.

El secretario general de la CDU, Carsten Linnemann, cuestionó si Scholz conserva la autoridad para dirigir el país y culpó a las políticas de la coalición gobernante por el ascenso del AfD.

Alice Weidel, colíder de AfD, dijo que una de las razones del éxito del partido es que los votantes se han vuelto más críticos tanto con la UE como con el euro, especialmente en las regiones orientales de Alemania, donde el partido era la fuerza más fuerte.

"Después de un comienzo difícil de la campaña electoral, llegamos a las etapas finales de manera muy efectiva", dijo Weidel en una entrevista con la emisora ​​pública ARD.

Pero es probable que las luchas internas entre los diversos partidos de extrema derecha les impidan formar una facción uniforme a nivel de la UE.

Alternativa para Alemania fue expulsada de su grupo político paneuropeo Identidad y Democracia después de que su principal candidato, Maximilian Krah, dijera que no todos los miembros de la organización paramilitar nazi de las SS eran criminales. Eso fue después de que Krah ya tuvo que dejar de hacer campaña en medio de un escándalo de espionaje.

En los Países Bajos, el conservador holandés Geert Wilders logró avances significativos el jueves, aunque no logró obtener la mayor cantidad de escaños holandeses en el Parlamento Europeo. Esa victoria fue reclamada por una coalición de partidos de izquierda.

Están en juego cuestiones críticas que deben decidirse durante la próxima legislatura parlamentaria, incluido cómo hacer que las industrias europeas sean más competitivas, cómo impulsar las capacidades de defensa del bloque y cómo competir con China. El gasto futuro de Ucrania también podría contar con la aprobación del parlamento.

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