Moscú aprueba un acuerdo de Unilever para vender activos rusos, dice el diario RBC
miércoles, 4 de septiembre de 2024
La empresa Unilever ha enfrentado críticas por permanecer en Rusia desde que Moscú envió tropas a Ucrania en febrero de 2022
Reuters
El gigante de los bienes de consumo Unilever recibió la aprobación del gobierno ruso para vender sus activos en Rusia, informó el miércoles el diario de negocios RBC, citando fuentes anónimas familiarizadas con el asunto.
Unilever ha enfrentado críticas por permanecer en Rusia desde que Moscú envió tropas a Ucrania en febrero de 2022, aunque ha reducido algunos gastos y operaciones. RBC informó que los activos de Unilever en Rusia estaban valorados en unos 35.000-40.000 millones de rublos (entre US$393 y US$449 millones). Unilever y el Ministerio de Finanzas ruso declinaron hacer comentarios.
En su informe del primer semestre, publicado en julio, Unilever afirmaba que, al 30 de junio, el negocio ruso contaba con unos activos netos de unos 600 millones de euros (US$663 millones), incluidas cuatro fábricas.
El Kremlin exige un descuento de al menos el 50% en los acuerdos de salida de empresas de lo que denomina países "hostiles", es decir, aquellos que han impuesto sanciones a Rusia. El éxodo empresarial de Rusia ha costado a las empresas extranjeras al menos US$107.000 millones en amortizaciones y pérdidas de ingresos.
El presidente ejecutivo, Hein Schumacher, dijo a la prensa en julio que la empresa había localizado "sustancialmente" sus operaciones en Rusia en el último año y afirmó que su principal objetivo era minimizar las contribuciones económicas al Estado ruso.
La salida de Rusia sería una de las decisiones más importantes de Schumacher, que en su primer año en el cargo ha supervisado planes para escindir su negocio de helados, despedir hasta 7.500 empleados y centrarse en 30 marcas clave para revertir años de bajo rendimiento.
En marzo de 2022,Unilever, propietaria de las marcas de sopa Knorr y jabón Dove, se convirtió en la primera gran empresa alimentaria europea en suspender sus importaciones y exportaciones a Rusia.
Ha interrumpido todo el gasto en medios de comunicación y publicidad en ese país, pero ha seguido suministrando a la población rusa sus productos básicos de alimentación e higiene fabricados en Rusia.