Nikki Haley y DeSantis, antiguos rivales políticos de Trump, ahora apoyan al candidato

En alguna ocasión, Nikki Haley dijo que Donald Trump estaba “totalmente desquiciado” y “disminuido”. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, señaló anteriormente que el expresidente acogería a los republicanos más “despreciables” si “besan el anillo”. Este martes, ambos afirmaron que es el hombre más idóneo para ser el próximo presidente de Estados Unidos.

Un desfile de rivales de Trump en las primarias subió al escenario de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee para alinearse detrás del hombre del que una vez se burlaron, una muestra pública de lealtad necesaria para asegurar su futuro en un partido firmemente en manos de Trump.

La velada ofreció a Trump la oportunidad de ampliar su convocatoria más allá de sus partidarios más leales en su intento de derrotar al presidente Joe Biden. Pero las apariciones de sus rivales, junto con sus oponentes de 2016 Marco Rubio y Ted Cruz, fueron una señal inequívoca del control total de Trump sobre el partido.

El expresidente ha fortalecido su influencia en los últimos meses al nombrar a su nuera como copresidenta del Comité Nacional Republicano y al ayudar a redactar la plataforma del partido.

También dejó claro que el discurso de unidad tras el intento de asesinato contra Trump se refería al Partido Republicano y no a la nación en su conjunto. Mientras Haley instaba a los republicanos a atraer a más gente a su bando, afirmando que “somos mucho mejores cuando somos más grandes”, otros oradores acusaban a Biden de permitir que el país se viera desbordado por los inmigrantes ilegales y el fentanilo.