Nuevo gobierno israelí logra voto mayoritario y pone fin al mandato de Netanyahu

La carrera de 12 años de Benjamin Netanyahu en el poder terminó cuando el parlamento de Israel votó en una coalición dispar que se comprometió a dejar de lado las ideologías políticas en conflicto para centrarse en imperativos nacionales como trazar una recuperación económica de la pandemia del coronavirus.

Los legisladores en el parlamento de 120 miembros votaron 60 a 59 con una abstención para instalar al nacionalista judío religioso Naftali Bennett como primer ministro. Está listo para entregar las riendas en agosto de 2023 al centrista Yair Lapid en virtud del acuerdo de reparto del poder que permitió que el nuevo gobierno despegara.

"Esta es la hora en que la carga de liderar la nación y el país pasa, como en una carrera de relevos, a la próxima generación", dijo Bennett, un millonario de la alta tecnología, sobre las incesantes insultos de los aliados de Netanyahu mientras se dirigía al pleno. antes de la votación.

Para el acusado Netanyahu, la votación marca una caída brutal del poder que lo deja aún más en peligro legal. Está en juicio por cargos de corrupción, lo que niega, y fuera de su cargo ya no tiene la opción de buscar la aprobación de una legislación que proteja a un líder en ejercicio de ser procesado. Prometió volver para liderar el país.

En la parte superior de la agenda del nuevo gobierno está la aprobación del primer presupuesto nacional en tres años para calmar las preocupaciones de los inversores y las agencias de calificación sobre el surgimiento de Israel de la crisis de salud global. El desempleo y la deuda pública aumentaron el año pasado, pero Israel se ha visto afectado durante años por una baja productividad, un alto costo de vida y la desigualdad. Cuatro elecciones inconclusas durante dos años, impulsadas en parte por el juicio por corrupción en curso de Netanyahu, solo profundizaron sus problemas.

La economía que el gobierno de Israel post-Netanyahu puede heredar

Será difícil llegar a un acuerdo sobre cuestiones diplomáticas y de seguridad porque la coalición alberga facciones seculares y religiosas, belicistas y pacíficas, e incluye un partido árabe por primera vez en la historia de Israel.

Eso hace que algunos problemas regionales urgentes sean potencialmente desestabilizadores. Estados Unidos está pidiendo la reconstrucción de Gaza , golpeada por Israel en el conflicto de 11 días del mes pasado que también alimentó las luchas comunales entre judíos y árabes en ciudades israelíes. Las negociaciones de las potencias mundiales para reactivar el acuerdo nuclear con Irán, el principal enemigo de Israel, podrían complicar las relaciones con Washington.

Bennett, un millonario de 49 años y ex ejecutivo de tecnología que encabeza el pequeño partido Yamina, se asoció con Lapid después de que las elecciones de marzo produjeran el cuarto punto muerto en dos años. Ni el bando de Netanyahu ni el bloque opuesto pudieron reunir una mayoría parlamentaria sin Bennett, lo que lo convirtió en un hacedor de reyes.

El ex ministro de Defensa vaciló sobre su decisión durante los combates con los militantes de Hamas en la Franja de Gaza el mes pasado, pero finalmente decidió que Netanyahu no tenía suficientes escaños para formar un gobierno de derecha y evitar otra ronda de votaciones, lo que finalmente dio lugar a la gobierno más improbable en la historia de Israel.

O, según Netanyahu, una coalición que pone en peligro el futuro del país.

Argumentó que un gobierno que incluya a Lapid y socios de izquierda se acobardaría ante la presión internacional para reactivar el acuerdo con Irán, que Netanyahu caracteriza como un camino para que la República Islámica amenace a Israel con armas nucleares. E insistió en que un gobierno dependiente de un partido árabe parecería débil a los ojos de los militantes palestinos.

Incluso antes de que fuera formalmente expulsado del cargo, Netanyahu señaló que una oferta de regreso estaba a la vista, y pronto.

"Si estamos destinados a estar en la oposición, lo haremos con la cabeza en alto hasta que derroquemos a este peligroso gobierno y volvamos a liderar el país en nuestro camino", dijo en un discurso ante el parlamento.