Paraguay propone a Argentina y Brasil un plan para poder construir un gasoducto
miércoles, 4 de junio de 2025
Casi la mitad del proyecto, de US$1.900 millones, se construiría en Argentina y Brasil, donde se conectaría con oleoductos existentes
Bloomberg
Paraguay está presionando a Argentina y Brasil para que firmen acuerdos que manifiesten su apoyo político a un proyecto de gasoducto natural que uniría a los tres países, según un alto funcionario de la nación sudamericana sin litoral.
Mauricio Bejarano, viceministro de Minas y Energía, se muestra optimista de que se puedan firmar memorandos de entendimiento este año y crear un grupo de trabajo para estudiar formalmente el plan de Paraguay para un conducto de 1.050 kilómetros (652 millas).
“Creemos que este es un año crucial para avanzar con esta propuesta”, declaró Bejarano en una entrevista desde Asunción. La disminución de las exportaciones de gas boliviano a Brasil ha generado un sentido de urgencia para el proyecto, añadió.
Argentina está interesada en vender más gas de sus yacimientos de esquisto de Vaca Muerta a Brasil mediante la modernización de los gasoductos que atraviesan Bolivia o la construcción de una nueva línea directa a Brasil, o a través de Paraguay.
Bolivia podría no tener excedentes de gas para vender antes de finales de la década debido a la caída de la producción de sus yacimientos agotados, y Brasil comenzó a importar gas argentino a través de Bolivia por primera vez en abril.
El presidente Santiago Peña intenta convencer a sus vecinos para que apoyen un oleoducto que utilizaría la servidumbre de paso de la Ruta Bioceánica, actualmente en construcción en la escasamente poblada región del Chaco paraguayo. Casi la mitad del proyecto, de US$1.900 millones, se construiría en Argentina y Brasil, donde se conectaría con oleoductos existentes, según un estudio encargado por Paraguay.
Paraguay podría eventualmente utilizar parte del gas para generar electricidad, ya que la creciente demanda energética interna amenaza con agotar su excedente de energía hidroeléctrica en la década de 2030, afirmó Bejarano. "Necesitamos incorporar una nueva fuente de energía a nuestra matriz energética que hoy no existe", afirmó.