Perú, México y Colombia tienen las tarifas residenciales de electricidad más altas

Los hogares de Perú, México y Colombia tienen los costos más altos de electricidad de Latinoamérica. El promedio mensual de un recibo eléctrico en Perú asciende a US$29,57, seguido por México (US$28,24) y luego por Colombia (US$25,97), según datos de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (Snmpe) de Perú, Comisión Federal de Electricidad (CFE) de México y el Ministerio de Minas y Energía de Colombia.

Luis Ernesto Mejía, exministro de Minas y Energía, explicó que en Colombia el precio es adecuado para remunerar todas las decisiones de confiabilidad, cobertura, calidad y dificultades geográficas que tiene el país.

Además, dijo que en Colombia los precios reflejan una suerte de decisiones que no tienen exactamente que ver con el kilovatio/hora. Aunque la factura puede resultar cara, la energía no es necesariamente lo más costoso dentro de esta, sino que hay diferentes factores que se deben tener en cuenta en la composición de estos precios.

En primer lugar, comentó que por su geografía, Colombia resulta desafiante para proveer energía a sus habitantes. “El país es muy arrugado con tres cadenas montañosas que atravesar. Además, la densidad de usuarios por kilómetros es baja, por lo que se encarece llevar este servicio a algunas regiones y a ciertos estratos”.

En segundo lugar, Mejía dijo que hay infraestructuras redundantes que se han instalado a lo largo del país. “En algunos casos se han tenido que colocar no solo dos sino que tres redes de transmisión y este es otro elemento que aumenta las tasas de energía”.

Acompañado a esto, está el tema de violencia que afecta la seguridad de la infraestructura eléctrica e implica una dificultad para controlar la transmisión de energía en el país.

El experto también manifestó que desde el apagón de 1992, las decisiones políticas del Gobierno de Colombia han sido las de nunca más tener problemas de razonamiento eléctrico. “Se debe tener en consideración que tener plantas de generación de energía disponibles para evitar crisis energéticas también suponen un costo adicional que se reflejan en las facturas residenciales”.

“Las decisiones que ha tomado Colombia para proveer con energía a sus habitantes han sido caras y se traducen en las facturas de las casas, generando una percepción que la electricidad es costosa en el país”, declaró Mejía.

Si se comparan los precios de la electricidad en Colombia con los demás países de la Región se debe recordar que las políticas energéticas de cada estado son diferentes. Asimismo, varían las topologías de acuerdo a cada país; es decir, las formas de asignar los costos de energía. También, es preciso señalar que la disposición geográfica de cada país afectará los costos de este servicio.

Quizá todavía más necesario sea observar cuánto está subsidiando el Gobierno para disminuir los precios de electricidad residencial a los consumidores en cada país. Por ejemplo, ¿por qué en Perú las facturas promedio por familia casi alcanzan US$30 y en Venezuela se quedan en US$ 5,23 (cifras del Ministerio del Poder Popular para la Energía Eléctrica de Venezuela)?

Germán Corredor, director del Observatorio de Energía de la Universidad Nacional, manifestó que en Perú se cobra este servicio al costo. En ese país, “el subsidio es más pequeño y solo es para los más pobres. Por ser una economía de corte neoliberal, el subsidio no existe para cubrir la energía”.

Por el otro lado, agregó que en Venezuela todo se subsidia con los ingresos que genera el petróleo. Corredor dijo que “los mecanismos de subsidios no son sostenibles. El día que el petróleo baje de precio no sé qué pasará”.

Respecto a Colombia, opinó que es el único país con un sistema de estratos de la Región. Por esto, las tarifas residenciales siguen un esquema de cobro ajustado a esta clasificación. Mientras que hay subsidios para los primeros tres estratos, para el estrato cuatro las tarifas de electricidad son al costo. Por esta razón, el promedio de pagos de este estrato son los más comparables a los valores de otros países donde no hay subsidios. Por último, en los estratos cinco y seis, funciona un sistema de contribuciones.

“En el país, para compensar y financiar los subsidios de los estratos más bajos, a los estratos cinco y seis se les exige una contribución. El resto de fondos que hacen falta los pone el Gobierno. Este es el proceso que ha creado el país para que las empresas reciban el retorno completo de lo que les cuesta producir la electricidad”, dijo el investigador.

Del contexto regional también destaca Argentina por tener el segundo precio más barato de energía residencial (US$11,9 como promedio de factura mensual, según datos de Bloomberg). Corredor aclaró los motivos detrás de esto. “Cuando privatizó las empresas eléctricas hace 20 años, Argentina había puesto una tarifa en dólares. Luego, cuando llegaron los Kirchner los precios pasaron a pesos argentinos y las congelaron”.

Es decir, el motivo por el cual los precios resultan tan bajos es porque no han recogido el tema de la devaluación de la moneda. Corredor mantuvo que este es un “error de política porque, finalmente, esos subsidios van en contra de las empresas y el Gobierno. Al final, le resulta más costoso al Gobierno porque deben emplear una estrategia adicional para capitalizar a las empresas”.

Edwin Cruz Caballero, director de Energía y Gas de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos (Andesco), afirmó que “en Colombia, los usuarios de menores ingresos tienen una alta participación en la estructura de consumidores de las empresas distribuidoras y comercializadoras, por lo cual es importante desde el Gobierno nacional facilitar los aportes de presupuesto nacional para cubrir el déficit de los subsidios de las tarifas de energía y gas. Este es el esquema de solidaridad”.

Consumo eléctrico de los hogares en América Latina
La agencia internacional de energía (International Energy Agency ) ofreció datos del promedio mensual de consumo de energía de los hogares en los países del mundo hasta 2012.

De la Región, lidera Brasil con un consumo de electricidad de 117.646 gigavatios por hora (GWh). Luego, le sigue México con un promedio de 52.771 GWh y en tercer lugar aparece Argentina con 38.605 GWh. Los países que menos consumen en promedio son Chile (10.152 GWh) y Perú (8.657 GWh).

Las Opiniones

Luis Ernesto Mejía
Exministro de minas y energía
“Las decisiones que ha tomado Colombia para proveer con energía a sus habitantes han sido costosos y se traducen en las facturas. Por esto, se percibe como caro este servicio”.

Germán Corredor
Director del observatorio de energía de la Universidad Nacional
“Los mecanismos de subsidio de Venezuela no son sostenibles. El día que el petróleo baje de precios no sé qué pasará con los precios de electricidad en las residencias de ese país”.