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Pontegadea y GLL están entre los nuevos dueños de la Gran Vía de Madrid

Expansión - Madrid

Más de una decena de edificios vendidos en apenas 15 meses y en la misma calle. Este es el ritmo de actividad inmobiliaria que presenta la Gran Vía de Madrid. La centenaria arteria vive una época dorada, reflejo del mercado del boom inversionista que atraviesa España y, sobre todo, el centro de Madrid y Barcelona.

En sus 1,3 kilómetros de longitud, han comprado inmuebles desde el dueño del grupo Inditex, Amancio Ortega y aseguradoras como Axa, a inversionistas mexicanos o grupos hoteleros como el español VP. Las inversiones han disparado el volumen de adquisiciones a más de unos US$1.300 millones, en una única calle, en año y medio. “El interés por la Gran Vía engloba a prácticamente a todos los actores del mercado: promotores, fondos, inversionistas privados, compañías inmobiliarias y especialistas hoteleros”, explica Elvira Rodríguez, directora de Inversión High Street de la consultora Aguirre Newman.

No sólo el perfil del comprador es muy diverso, también el inmueble que compran y, por ende, el precio de las operaciones. La firma GLL pagó US$61 millones por el local situado en el número 48, mientras que Pontegadea desembolsó US$455 millones por el edificio situado en el 32, que se encuentra aún en obras, y que en unos meses tendrá como principal inquilino a otra firma de moda, Primark.

¿Por qué todos los inversionistas quieren comprar en la zona? “El inversionista que compra hoy en la Gran Vía confía en el recorrido que tiene la calle tanto en rentas como en la revalorización de los inmuebles. Otro aspecto importante que seduce a algunos inversionistas es la oportunidad que brinda esta calle de poder rehabilitar algunos edificios y aportar valor a través de una gestión activa”, comentan desde Aguirre Newman. Entre sus principales atractivos también destaca su foco de atracción de visitantes, tanto madrileños como turistas. «Desde el punto de vista del retail, la calle ha tenido un comportamiento contracíclico, es decir, en los años de crisis, la renta de los locales comerciales en el mejor tramo de Gran Vía crecía por encima del IPC y no ha habido correcciones a la baja”.

Rentas de locales han subido 40% desde 2006
Según un informe de Aguirre Newman, la Gran Vía es el único eje comercial cuyos alquileres no sólo no han bajado en los años de caída del consumo, sino que desde 2006 han aumentado 40%. Tan sólo en 2014, los alquileres han subido, de media, 9,3%, situándose en casi US$227 mensuales el metro cuadrado en los números más cotizados. El buen momento que vive la calle madrileña continuará los próximos años gracias a dos proyectos emblemáticos: el complejo Canalejas, liderado por Grupo Villar Mir, y el Edificio España, comprado por el empresario chino Wang Jianlin.