Netanyahu fue declarado en buenas condiciones tras cirugía para colocar un marcapasos
sábado, 22 de julio de 2023
El primer ministro israelí fue sometido a una intervención en la noche del sábado al domingo en la que se le colocó un marcapasos
Reuters
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, fue declarado en "buenas condiciones" por los médicos el domingo después de la cirugía de implantarle un marcapasos.
"Hace una semana me colocaron un dispositivo de monitorización. Ese dispositivo ha emitido un pitido esta tarde y ha dicho que debo ponerme un marcapasos y que debo hacerlo ya esta noche", dijo Netanyahu en un video difundido el sábado. "Me siento muy bien, pero tengo que escuchar a mis médicos".
Netanyahu, de 73 años, apareció en la grabación de pie y sonriendo. Dijo que sus médicos le aseguraron que sería dado de alta del hospital "mañana por la tarde". El ministro de Justicia, Yariv Levin, le sustituirá durante el procedimiento, dijo la oficina de Netanyahu.
Netanyahu se sometió al procedimiento en el Centro Médico Sheba en Tel HaShomer, dijo su oficina. Había sido hospitalizado allí durante la noche del 15 de julio por lo que él dijo que era deshidratación por pasar las vacaciones en el Mar de Galilea sin protegerse adecuadamente de una ola de calor.
El 16 de julio, el hospital confirmó su diagnóstico inicial de deshidratación y dijo que las pruebas adicionales realizadas con un monitor subcutáneo Holter revelaron que Netanyahu se encontraba "en perfecto estado de salud cardiaca", aunque el dispositivo permitiría a su equipo médico seguir controlando su estado.
Netanyahu se enfrenta a una crisis interna en su sexto mandato récord como primer ministro, con un aumento de las protestas contra los cambios judiciales impulsados por su coalición nacionalista religiosa.
Netanyahu dijo en el video que sería dado de alta del hospital a tiempo para una votación clave programada para comenzar en el Parlamento el domingo y durar todo el lunes.
Decenas de miles de israelíes marcharon el sábado a Jerusalén con la esperanza de conseguir apoyo contra la reforma judicial y se concentraron frente al Parlamento antes de la votación del proyecto de ley que limitaría algunos de los poderes del Tribunal Supremo.