Reino Unido

Reino Unido podría necesitar bombas de calor e hidrógeno, según Boris Johnson

El fin de esta acción sería cumplir con la meta de obtener cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050

Bloomberg

El primer ministro Boris Johnson dijo que el Reino Unido necesita encontrar una manera de reducir el costo de la electrificación del agua caliente sanitaria y la calefacción para cumplir su objetivo de cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050.

En declaraciones a un panel de legisladores en el Parlamento el miércoles, Johnson dijo que las bombas de calor siguen siendo demasiado caras para los propietarios de viviendas. Alrededor de 38.000 de los dispositivos se instalaron el año pasado, solo una fracción de los 600.000 que pretende para 2028.

“Seamos francos, estas cosas cuestan alrededor de US$10.000 cada una”, dijo. "Esto es mucho dinero para la gente común".

La descarbonización del calor en los edificios es uno de los mayores obstáculos para el Reino Unido para cumplir sus objetivos climáticos. Pero las bombas de calor, que utilizan electricidad para absorber el calor del aire y transferirlo a radiadores y calefacción por suelo radiante, suelen costar casi tres veces más que una caldera de gas, y solo funcionan en hogares bien aislados.

"Hay algunas grandes apuestas que es posible que debamos hacer", dijo Johnson. "Es posible que debamos hacer algunas apuestas sobre el hidrógeno, pero también sobre las bombas de calor de fuente terrestre y de fuente de aire".

El asesor independiente del gobierno, el Comité de Cambio Climático, ha dicho que para que el Reino Unido alcance su objetivo, deberá prohibir la venta de todas las calderas de gas nuevas a partir de 2033. Pero eso por sí solo no sería suficiente para cubrir los costos. Los ministros también necesitarían aumentar su gasto anual en descarbonizar el calor a $9.000 millones de libras (US$12.400 millones) al año para 2030, por encima del plan actual de US$6.000 millones al año, dijo la CCC.

El gobierno del Reino Unido ha retrasado repetidamente su estrategia de calefacción y edificios, que debía publicarse en enero. También eliminó la Subvención para Casas Verdes que se suponía ayudaría a sellar las casas con corrientes de aire. Ahora se espera esa estrategia en las próximas semanas.

Johnson dijo que su prioridad es mantener bajos los precios para los consumidores, y varias empresas de servicios públicos del Reino Unido están listas para respaldar cambios en la forma en que se gravan los hogares por su uso de energía, cambiando los impuestos ecológicos de la electricidad al gas.

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