Reino Unido y Alemania revirtieron políticas de riesgo o beneficio sobre AstraZeneca
viernes, 7 de mayo de 2021
Los cambios en las recomendaciones sobre la vacuna de la farmacéutica demuestran cuán difícil resulta para autoridades calcular los beneficios
Reuters
Reino Unido restringió el viernes el uso de la vacuna de AstraZeneca contra el covid-19, mientras que Alemania decidió que solo administraría dosis a pedido de las personas, en un vuelco al manejo de riesgos que refleja los progresos divergentes de las campañas de inmunización en Europa.
Los cambios en las recomendaciones sobre la vacuna de la farmacéutica anglo-sueca demuestran cuán difícil resulta para las autoridades de salud calcular los beneficios contra los riesgos de que las personas desarrollen un tipo muy raro de trombosis venosa, que ocasionalmente han sido fatales.
Cuán exigentes pueden permitirse ser los gobiernos depende en gran medida de lo que hayan avanzado hacia la vacunación de suficientes personas como para reducir la propagación de las infecciones por coronavirus y disminuir el número de muertes.
En Reino Unido, que ha empleado en gran medida las inyecciones de AstraZeneca desarrolladas en conjunto con la Universidad de Oxford, el 51% de las personas ha recibido al menos una dosis de vacuna y las muertes diarias han caído a los dos dígitos.
En ese contexto, el panel de asesores de vacunas de Gran Bretaña dijo que a las personas menores de 40 años se les debería ofrecer una alternativa a las dosis de AstraZeneca, debido al riesgo -pequeño- de sufrir una trombosis, lo que eleva el límite de edad anterior desde los 30 años.
Anthony Harnden, vicepresidente del Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización de Gran Bretaña (JCVI), destacó que la decisión de proponer vacunas alternativas para los menores de 40 años "se basó en la epidemiología del Reino Unido".
Destacó que el balance beneficio-riesgo de la vacuna de AstraZeneca era diferente en Alemania debido a las mayores tasas de infección en ese país.
En Alemania, la incidencia de siete días es de 126 casos por cada 100.000 personas y, aunque tiene una tendencia a la baja, es casi seis veces la tasa de Reino Unido, según muestran los datos oficiales.
La cautela de Reino Unido se produce luego de audaces decisiones previas al emitir la aprobación de emergencia para la vacuna de AstraZeneca, una decisión estratégica con la que buscaba administrar las primeras dosis a la mayor cantidad de personas posible.
Alemania, por el contrario, se ha basado en el proceso de adquisición de vacunas de la Unión Europea, que se ha visto afectado por una disputa con AstraZeneca después de que la empresa recortara sus entregas debido a problemas de producción.
En el aspecto regulatorio, Berlín primero prohibió la vacuna de AstraZeneca para los mayores debido a la falta de datos en los ensayos, antes de afirmar que las personas de menor edad no deberían recibirla, ya que estaba revisando algunos casos de pacientes con trombosis venosa, en particular en mujeres más jóvenes.
Ahora, el ministro de Salud, Jens Spahn, pone la vacua a disposición de quienes la deseen, siguiendo un consejo médico, y permite que las personas reciban una segunda inyección tan pronto como cuatro semanas después de la primera dosis.
La medida llega con miras a las vacaciones de verano en Europa y coincide con la rápida aprobación de una ley esta semana que liberaría a quienes estén completamente vacunados de las medidas de distanciamiento social impuestas por Berlín para combatir la pandemia.
Las vacunas de AstraZeneca almacenadas en los centros de vacunación ahora se utilizarán principalmente para administrar las segundas inyecciones. Las entregas futuras se enviarán a los médicos de familia, lo que ofrecerá una ruta sin complicaciones para quienes deseen protección a tiempo para sus vacaciones.
"Estamos convencidos de que esta oferta es atractiva para aquellos que de otro modo no se vacunarían tan rápido", dijo Spahn en una conferencia de prensa.