Retos económicos del nuevo presidente de Argentina

Daniel Scioli, Mauricio Macri, Sergio Massa, Margarita Stolbizer, Nicolás del Caño y Adolfo Rodríguez, se la juegan por instalarse en la Casa Rosada y definirán si continúa o se termina la era Kirchner, la cual lleva en el poder 12 años. Los retos económicos para el cargo más importante del país gaucho podrían resumirse en cinco, de acuerdo a lo planteado en Diario Financiero: déficit fiscal en ascenso, precios al alza, moneda demasiado fuerte, desaparición del superávit comercial y caída de las reservas.

Rafael Nieto, analista de política internacional, indicó que el reto de fondo es ponerle fin al populismo, entendiendo este como un sistema de Gobierno donde se fomenta la dependencia de sectores de la población para generar una clientela para el Estado y para los que manejan dichos subsidios. 

De acuerdo con Nicolás Tereschuk, politólogo argentino, “la presidenta Cristina Kirchner va a buscar ejercer el poder que detenta hasta el último día de su gestión, el 10 de diciembre próximo. El próximo gobierno tendrá sus propias políticas y su propio estilo, que seguramente no serán exactamente iguales al actual. De todos modos, hay un conjunto de políticas aplicadas por el kirchnerismo que todos los candidatos dicen que mantendrán. Por otra parte, la figura política de Cristina Kirchner seguirá teniendo importancia. Puede pensarse en los ejemplos de Lula Da Silva, Álvaro Uribe, Tabaré Vázquez o Michelle Bachelet, quienes no dejaron de existir políticamente cuando finalizaron sus presidencias”

Por otro lado, para Julio César Botero, experto en asuntos internacionales y política exterior y docente de la Universidad Politécnico Grancolombiano, lo que no se puede obviar en la agenda del nuevo mandatario es la reinserción de Argentina en la economía internacional. Y agregó que “dos de los indicadores que revisamos en el grupo de investigación es la competitividad de las naciones y la libertad económica y en este último aspecto Argentina se ha venido afectado desde el Gobierno de Néstor Kirchner hasta los dos de Cristina, lo que en consecuencia repercute en competitividad”.

Para lograr la victoria, el ganador deberá obtener como mínimo 45% de los votos o 40% de los sufragios con una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el que va atrás. Es decir, no es posible ganar ni con una pisada de talones. En esta medida, según la última encuesta de Polldata a la que tuvo acceso el diario El Cronista, ante la pregunta de por quién votaría si las elecciones fueran hoy, Scioli (el candidato del kirchnerismo) se quedaría con 37,2% de los votos, seguido por Macri (27,5%) y Massa (22,5%). Con una diferencia significativa se encuentran Stolbizer (4%), Del Caño (2,8%) y Rodríguez 1,8%.

Nieto expresó que aunque cabe la posibilidad que gane el candidato oficialista, aún en ese escenario seguramente tomará distancia con los Kirchner. 

Scoli, de 58 años, tiene una larga carrera que incluye cargos como diputado, vicepresidente y, en los últimos ocho años, gobernador de Buenos Aires. Entre sus propuestas resaltan bajar la inflación a un ritmo de cinco puntos porcentuales por año para alcanzar un nivel de un dígito al cabo de cuatro años, reducir el déficit fiscal primario y reducir el impuesto a las ganancias que afecta a sueldos medios y alto. 

Macri, de 56 años y perteneciente al partido Cambiemos, es reconocido por haber sido dos veces presidente del Club Boca Juniors y por haber llegado a la alcaldía de Buenos Aires. Reducir a un dígito de la inflación en un plazo de dos años, más un recorte en el déficit fiscal; negociar un acuerdo con los tenedores de bonos “holdouts” para evitar pagar la totalidad de la deuda en litigio judicial en Estados Unidos; mantener YPF y Aerolíneas Argentinas bajo control estatal, y continuidad de la AUH y eliminar el impuesto a las ganancias, hace parte de sus principales planes si llega a la Casa del Florero.

Las propuestas de Massa, de 43 años, actual diputado por el peronismo opositor y quien fue durante seis años alcalde de Tigre, contemplan regresar a Argentina a mercados globales de crédito antes de negociar con los “holdouts”, eliminar el impuesto a las ganancias e incrementar gravámenes a la renta financiera y a las actividades especulativas y suprimir límites a exportaciones de trigo, maíz y carnes bovinas, e impuestos a los embarques de trigo, y maíz.