Comunicaciones

Telefónica realizó la primera emisión de deuda híbrida en España en 2022

Expansión
RIPE:

La empresa confirma su intención de regresar a los mercados de deuda en los que este año solo ha hecho una incursión en mayo

Expansión - Madrid

El buen dato de la inflación en Estados Unidos de la semana pasada ha cruzado el Atlántico y ha abierto en Europa una ventana de emisión de deuda que Telefónica ha aprovechado para lanzar la primera colocación de híbridos de España en 2022. Barclays, Bank of America, BNP Paribas y Citi han sido los bancos elegidos para ello.

La operadora de telecomunicaciones ha usado su fortaleza y su condición de gran emisor internacional para romper el maleficio que pesa sobre estos instrumentos que computan a 50% como capital y que nadie en el Ibex 35, ni empresas ni bancos (con su modalidad particular, los CoCos), se ha atrevido a colocar en España desde que la guerra en Ucrania y la crisis de la inflación dispararon su coste.

Telefónica ha puesto fin a la sequía con una emisión de 750 millones de euros por la que pagará un interés de 7,125% que usará para recomprar todo lo que pueda de dos colocaciones de este tipo de deuda que tienen su primera ventana de amortización el año que viene, en una jugada con la que pretende no solo reducir el riesgo de refinanciación, logrando el dinero a buen precio ahora que hay una oportunidad, sino también ahorrarse algo del coste por el camino.

Lo hará aprovechando que la crisis energética y de la inflación ha hundido el precio de los híbridos, que están cotizando por debajo del valor nominal al que fueron emitidos. Por eso, pagará 100% del precio en la recompra de la emisión que vence más cerca (la de marzo del año que viene), pero solo 98,25% de la que lo hace a mayor plazo (en septiembre de 2023).

¿Plusvalías?

Para los dueños de esa deuda, supone una ocasión de recuperar el dinero invertido e incluso de hacer alguna plusvalía si se han hecho con los híbridos a un precio inferior al que ofrece Telefónica, algo que es probable si la adquisición se ha realizado en los últimos meses.

Si no, les basta con no acudir a la oferta, aunque eso supone el riesgo de quedarse en emisiones poco líquidas y que pueden no ser amortizadas en las ventanas del año que viene, ya que los híbridos se emiten a perpetuidad y es potestad del emisor recomprarlos en los momentos que se abren para ello.

La intención de Telefónica es recomprar el máximo posible de los 676,4 millones de euros de la colocación que vence en marzo y utilizar el dinero restante para reducir los 823,6 millones que quedan de la operación que madura en septiembre, ya que tendrán preferencia en la venta los de la primera transacción.

Con este movimiento, Telefónica confirma su intención de regresar por todo lo alto a los mercados de deuda, en los que este año solo ha hecho una incursión en mayo. Y su objetivo no es solo el área euro, sino que también aspira a emitir en dólares en cuanto encuentre una ventana apropiada.

TEMAS


Telecomunicaciones - España - Las movidas de Telefónica