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Tesla les preguntó a las mujeres qué querían y creó el SUV Model X

Bloomberg

“Todo lo que se le ocurra, yo lo manejé. Pero, cuando vi el video de Elon Musk en el que presentaba el Model X online, me dije: ‘Es este’”, contó Schwartz, que siempre lleva algo a bordo: clientes, carteles de venta, dos chicos, sus amigos, el perro. Además, su marido ya conduce un sedán Tesla Model S. “Quedé muy impresionada con el historial de seguridad del Model S e imagino que el X tendrá una calificación comparable”, añadió.

Tesla diseñó su primer SUV en parte para atraer a las mujeres y apuesta a que muchas de ellas opinarán lo mismo que Schwartz. Para que la compañía pueda alcanzar una ambiciosa meta anual de ventas de 500.000 vehículos en 2020, debe atraer a todo un nuevo contingente de conductores… y las mujeres compran más de la mitad de los SUVs crossover en los Estados Unidos.

Los primeros clientes de Tesla –muchos de ellos “early adopters” con afición por la tecnología- eran en su gran mayoría hombres. En 2012, el año en que el Model S llegó al mercado, las mujeres representaban sólo el 13,3 por ciento de las matriculaciones estadounidenses del sedán eléctrico, de acuerdo con los datos de IHS Automotive.

Proporción de géneros

Pero la proporción de géneros está cambiando en tanto las mujeres se sienten más a gusto con la tecnología de los vehículos eléctricos, el historial de seguridad de la compañía y la marca Tesla. En 2013, las mujeres dieron cuenta del 17,8 por ciento de las matriculaciones del Model S; en 2014, la proporción fue del 21,5 por ciento, según IHS. La Administración Nacional de Seguridad del Tránsito en las Carreteras le asignó al Model S una calificación de seguridad de cinco estrellas en agosto de 2013. Mientras que los SUV pueden tener mucho peso en la parte superior, los vehículos de Tesla están diseñados con la unidad motriz eléctrica ubicada bajo el auto, lo que hace descender el centro de gravedad y minimiza el riesgo de vuelco.

Con el X, las características demográficas de los clientes de Tesla podrían cambiar. Aunque las mujeres sólo compran el 40 por ciento de los autos en los EE.UU., adquieren el 53 por ciento de los SUV pequeños y el 48 por ciento de los SUV pequeños de lujo, de acuerdo con el análisis de J.D. Power Associates.

El orden de prioridades de Schwartz les resultará familiar a muchas compradoras de autos: una tercera fila de asientos, mucho espacio de carga, confiabilidad, economía de combustible y rendimiento.