En su discurso, Trump presiona para que Netanyahu sea indultado por corrupción

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presionó para que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, recibiera un indulto que le ofrecería un respiro de su actual juicio por corrupción durante un discurso el lunes en la Knesset.

"Oiga, tengo una idea, señor presidente. ¿Por qué no le concede un indulto? ¡Vamos!", le dijo Trump al presidente israelí, Isaac Herzog, que estaba sentado cerca.

El presidente estadounidense dijo que no tenía previsto abordar el tema en su discurso, pero "parece tener mucho sentido".

“Este ha sido uno de los mejores presidentes de la guerra, y puros y champán, ¿a quién demonios le importa eso?”, dijo Trump en una aparente alusión al primer ministro y sus acusaciones de soborno. “Bueno, ya basta de controversia por hoy, ¿no?”

No es la primera vez que Trump pide que se desestime el caso de Netanyahu, aunque la apelación desde el podio del parlamento israelí aumenta la tensión. Trump viajó a Israel para celebrar la liberación de los rehenes vivos restantes retenidos por Hamás tras un acuerdo de alto el fuego que su administración ayudó a negociar.

El presidente estadounidense generó controversia a principios de este año cuando hizo un llamado similar, y los oponentes políticos de Netanyahu expresaron su preocupación por la interferencia en el sistema judicial del país.

Netanyahu, de 75 años, fue imputado en 2019 en tres casos diferentes de soborno, fraude y abuso de confianza. Uno de ellos implica aceptar regalos de lujo, como champán y puros, de amigos que supuestamente buscaban favores. En los otros dos, se le acusa de ofrecer ayuda a propietarios de medios de comunicación a cambio de una cobertura favorable. Ha negado todas las acusaciones.

Los israelíes que apoyan al primer ministro afirman que los cargos son un intento del establishment liberal de derrocarlo, tras no haberlo logrado mediante las urnas. Trump ha afirmado que el caso refleja los cargos presentados en su contra entre sus periodos en la Casa Blanca, los cuales ha descrito como motivados políticamente.

El juicio en Israel se ha prolongado por más de seis años, y Netanyahu ha rechazado un acuerdo que le habría permitido reconocer faltas menores a cambio de mantenerse alejado de la política durante un período más prolongado.

La viabilidad de indultar al primer ministro es más complicada de lo que se cree: el presidente israelí generalmente indulta sólo a delincuentes convictos, y no a quienes han sido acusados ​​y aún están siendo juzgados.

Solo ha habido una excepción: la que hizo en su momento el padre de Isaac Herzog, Chaim Herzog, cuando era presidente, al indultar a los funcionarios del Shin Bet por su participación en el asesinato de dos secuestradores de autobuses palestinos. El jefe del Shin Bet accedió entonces a dimitir, algo que probablemente se le pedirá a Netanyahu, aunque no está claro si estaría dispuesto a hacerlo.