Globoeconomía

Turismo y marchas conviven en las calles de Madrid

Nicolás Abrew

Al llegar a Madrid, antes de salir a disfrutar de la ciudad, además de revisar el clima, el horario de atención de tiendas y museos, el medio de transporte a usar y las rutas a seguir, hay que consultar cuáles son las protestas convocadas para el día y por dónde pasarán.

La recesión económica ha consolidado más de 200 organizaciones que diariamente se toman las principales calles del centro histórico de la capital de España, meca del sector turístico debido a las atracciones arquitectónicas, gastronómicas y culturales que se encuentran en dicha zona.

Madrid City Tour, empresa que ofrece el servicio de transporte a turistas por los destinos más destacados de la ciudad, vive en silencio el drama de las protestas. Para no involucrar a los viajeros con la realidad socioeconómica actual, solo pone en sus paradas y en las puertas de los buses avisos en papeles sobre las marchas programadas para el día y el impacto que puede tener a determinadas horas en sus rutas. Uno de esos avisos decía lo siguiente: “el viernes 21 de septiembre entre las 10:30 y las 12:00 habrá una concentración frente al 45 de la calle Alcalá que afectará a nuestros recorridos”. Ese mismo día había un paro anunciado por parte de los trabajadores del metro, por lo que se disminuyeron las frecuencias en determinadas horas.

El sábado la situación se recrudeció, se programaron tres concentraciones en horarios clave para el comercio y el turismo en el último fin de semana que restan del verano.

Organizaciones como Economistas frente a la crisis, Madres solteras, Veterinarios sin fronteras, estudiantes, jueces y hasta policías se suman a los indignados que protestan por los impuestos, la reforma laboral, recortes en educación, función pública y sanidad, entre otros.

En los paraderos de los buses y en el metro solo se habla de un tema: la crisis. El común denominador son las “mentiras” que les dijo Mariano Rajoy durante la campaña a la Presidencia y los anuncios en contravía que expresó cuando llegó al poder.

Con promociones y actividades en otras atracciones turísticas de la ciudad, los empresarios se las arreglan para entretener a los turistas mientras pasan las manifestaciones. Una buena alternativa es visitar las ciudades aledañas a Madrid en días congestionados por las marchas. Segovia, Toledo y Ávila, son destinos interesantes a menos de una hora por tren en los que se puede pasar el día y regresar más tarde a disfrutar de la vida nocturna de la capital española.

Comerciantes, empleados y desocupados coinciden en que las medidas anunciadas por el Gobierno atentan contra el Estado de bienestar, por lo que cada uno aporta su grano de arena para lograr el objetivo de convocar a un referendo en el que se decida la política económica y social a adoptar en los próximos meses con el fin de poder salir de la crisis. Mientras que eso pasa, aprenden a convivir y a sobrellevar esta situación en la que no se avizora una pronta salida.