Último brote del delta en China, el más extendido desde Wuhan a pesar de medidas

Más provincias de China están luchando contra el Covid-19 que en cualquier otro momento desde que el patógeno mortal apareció por primera vez en Wuhan en 2019.

La variante delta altamente infecciosa se está extendiendo por todo el país a pesar de las medidas cada vez más agresivas que los funcionarios han promulgado en un intento por frustrarla. Se han encontrado más de 600 infecciones de transmisión local en 19 de 31 provincias en el último brote en la segunda economía más grande del mundo.

China informó el miércoles 93 nuevos casos locales y 11 infecciones asintomáticas. Tres provincias más detectaron casos: el centro de Chongqing, Henan y Jiangsu en la costa este.

Los funcionarios en China dicen que están comprometidos a mantener el llamado enfoque Covid Zero, a pesar de que los brotes están llegando más rápido , extendiéndose más y evadiendo muchas de las medidas que anteriormente controlaban el virus. Las drásticas respuestas necesarias para eliminar la variante delta han llevado a varios otros países que habían estado buscando la eliminación del coronavirus, incluidos Singapur y Australia, a cambiar el enfoque y, en cambio, confiar en altas tasas de vacunación para poder vivir con el virus como endémico.

Beijing reportó nueve infecciones el miércoles, incluida una que se informó anteriormente como asintomática. El recuento total de casos de la ciudad capital en la ola actual es ahora de 38, un recuento pequeño en comparación con la situación en otras partes del mundo, pero el más alto para Beijing desde un brote anterior al delta en enero y febrero. Se detuvo la venta de boletos a la ciudad para los trenes de 123 estaciones en 23 regiones, dijeron funcionarios en una reunión informativa del gobierno.

Los funcionarios del gobierno pusieron en cuarentena a los niños en dos escuelas de Beijing después de que se descubrió que un maestro estaba infectado. Otros 16 fueron cerrados porque su personal podría haber estado presente en el lugar de vacunación donde el maestro infectado recibió recientemente una vacuna de refuerzo.

El Ministerio de Comercio de China instó a los residentes el martes a abastecerse de artículos de primera necesidad para el otoño y el invierno a fin de estar preparados para futuros brotes que podrían desencadenar bloqueos repentinos.

Chongqing, un municipio nuevo en el último brote, inició pruebas masivas durante la noche, ya que los funcionarios pretenden actuar con decisión durante las "24 horas doradas" después de que se detecta por primera vez el virus. Changzhou, una ciudad en la provincia de Jiangsu, ha detenido la escuela desde el miércoles durante al menos tres días, y los estudiantes recurren a clases en línea.

China podría ir mucho más lejos en su intento por mantener fuera al Covid-19. Más de 30.000 personas se sometieron a pruebas en Shanghai Disneyland el domingo, y los visitantes se mantuvieron dentro del parque hasta casi la medianoche después de que se descubrió que una persona infectada había estado allí. Mientras tanto, a cientos de miles de residentes en la remota ciudad de Ruili en el sureste, en la frontera con Myanmar de alto riesgo, se les ha prohibido salir durante meses.

El principal experto en salud de China, Zhong Nanshan, confía en que el país puede contener el brote actual en un mes, según una entrevista con el medio estatal CGTN.

A pesar de la tendencia global de países que aprenden a convivir con el virus, Zhong, quien ayudó al gobierno a sofocar muchos brotes desde que comenzó la pandemia, defendió el enfoque de China, que ha sido criticado por su impacto en la economía. Si bien las restricciones necesarias para controlar el virus son costosas, abrir el país y permitir que el patógeno se propague exigiría un precio aún mayor, dijo.