Una desaceleración económica impactaría generación de empleo en América Latina
miércoles, 20 de julio de 2022
La Nación que hoy registra la tasa más baja de desempleo es México, con 3,56%, seguida por Perú, con 6,8% y Argentina, con 7%
Pasado el momento más álgido de la pandemia provocada por el covid-19 y las restricciones más fuertes que hicieron retroceder a la economía global, esta parece estabilizarse y volver a niveles de 2019; sin embargo, la ralentización de esta dinámica y los posibles números negativos impactarían uno de los factores más relevantes para América Latina: el empleo.
Las principales economías de la región ya han vuelto o se encuentran cerca de los niveles de desempleo que se registraban al cierre de 2019, meses antes de que se diera el impacto de los confinamientos. La Nación que hoy registra la tasa más baja es México, cuyo registro llega a 3,56%, seguida por Perú, con 6,8% tras tocar un máximo 16,5% a finales de 2020.
En ese mismo orden también aparece Argentina con 7% de escasez de trabajo en medio de un panorama macroeconómico que parece agravarse con una inflación por encima en 64%. Adicionalmente, le siguen Chile, con 7,8%; Colombia, con 10,65% y Brasil, con 11,1%.
En el corto y mediano plazo, la situación podría volverse precaria. Según Julio Romero, economista jefe de Corficolombiana, durante los últimos dos años hemos visto una recuperación de los puestos de trabajo, hecho que ha evidenciado la buena dinámica de Colombia y la región.
“No obstante, este dato no se ha movido al mismo ritmo que la producción. Lo que nos mostró en mayo el Índice de Seguimiento de la Economía (ISE) es que la actividad está cerca de 9% por encima de los niveles prepandemia, lo que quiere decir que estamos produciendo más con el mismo nivel de entonces”, dijo el experto.
A esto se sumaría un problema estructural y que marca un reto de política pública en torno a cómo coordinar el sector público y privado para atacar la falta de puestos de trabajo.
“En caso de darse una recesión global, esta se va a sentir en una menor demanda por productos de exportación, una caída en las remesas y en los montos de inversión, además de mayores tasas de cambio. Los más vulnerables serán aquellos ciudadanos de ingresos bajos y quienes estén vinculados a la economía informal”, remató.
De hecho, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en América Latina y el Caribe se han registrado importantes avances en la cobertura legal de las personas que realizan trabajo doméstico, pero la alta informalidad en este sector laboral y las dificultades para aplicar las leyes dejan a la mayoría sin ningún tipo de protección social.
“La región enfrenta un desafío muy claro, que es el de la aplicación efectiva de las leyes sobre trabajo doméstico, para que los progresos alcanzados durante los últimos años se vean reflejados en la calidad de vida de las personas”, dijo la directora regional de OIT para América Latina y el Caribe, Claudia Coenjaerts.
El papel de las tasas de interés y la inflación
Los bancos centrales y los precios de los productos que se consumen a diario se han convertido en los protagonistas del panorama global. Hoy, los emisores buscan atajar un repunte excesivo del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que ha encarecido los bienes y servicios, pero que a su vez ha llevado a que Estados Unidos y la Unión Europea estén hablando de la llegada de una recesión que golpearía aún más la economía.
En América Latina el panorama no es muy diferente a lo que se viene proyectando por parte de la Reserva Federal y el Banco Central Europeo en cuanto a política monetaria se refiere. Mientras que la Fed ha subido dicha tasa 150 puntos básicos hasta 1,75% en lo que va del año y en Europa se mantiene en 0%, las principales economías de la región han decidido endurecer su intervención en un promedio de 400 pb a lo largo de los siete primeros meses del año.
Entre las economías fuertes de la región, la Nación que ha tenido una mayor alza es Chile con un repunte de 575 pb, pasando de 4% a inicio de año, a 9,75% comenzando julio. A esta le siguen Colombia, con un repunte de 450 pb, desde 3% hasta 7,5%; Brasil, con 400 pb, desde 9,25% a 13,25%; Perú, con 335 pb, desde 2,5% a 6% y México, con 225 pb, desde 5,5% a 7,75%.
Según Sergio Olarte, economista jefe de Scotiabank Colpatria, cada país tiene sus idiosincrasias. “No estoy seguro que Colombia se haya demorado mucho más en modificar la tasa de intervención que otras economías fuertes de la región. Colombia bajó mucho menos esta cifra de referencia, mientras que Perú y Chile la degradaron casi a cero, nosotros la llevamos hasta 1,75%, por lo que no teníamos que comenzar tan rápido”.
Este panorama contrasta con el comportamiento de la inflación anualizada en estos países. La que lidera el listado es Chile, con un crecimiento del costo de vida de 869 pb hasta 12,49%, seguida por Colombia, cuyo indicador ha crecido 604 pb en los últimos doce meses, llegando 9,67%, el registro más alto en 22 años.
A este país se le suma Perú, con un aumento de 556 pb hasta 8,81%; Brasil, con un repunte de 354 pb hasta 11,89% y México, con un incremento de 211 pb hasta 7,99%. “A Colombia le queda un poco más de tiempo para subir las tasas de interés; no obstante, en general los mercados están viendo que América Latina fue el primero que comenzó a subirlas, lo cual emite una buena señal con los pares del mundo”, agregó Olarte.