Uruguay es el primer país de América Latina que empieza a reducir las tasas de interés
jueves, 20 de abril de 2023
El Banco Central de Uruguay tomó la decisión de reducir sus tasas de interés hasta 11,25%. Esto debido a su brecha de producción negativa
Bloomberg
Uruguay se convirtió en el primer país con metas de inflación en América del Sur en comenzar a reducir los costos de endeudamiento después de que la economía entrara en recesión técnica en la segunda mitad de 2022.
La decisión de recortar su tasa de referencia en un cuarto de punto hasta 11,25% sorprendió a los participantes del mercado encuestados por el banco central, quienes esperaban que los encargados de formular políticas dejaran la tasa sin cambios el miércoles.
El banco central había elevado su tasa de referencia 700 puntos básicos a 11,5 % entre agosto de 2021 y diciembre de 2022, ya que la inflación se aceleró a casi 10 % el año pasado. La medida de la autoridad monetaria marcó su primer recorte de tasas desde que el banco central volvió a adoptar una tasa de referencia como su principal herramienta de política en septiembre de 2020.
“Esta decisión es consistente con la continuidad de una política monetaria contractiva y el objetivo de continuar los esfuerzos” para llevar la inflación y las expectativas de inflación dentro del rango meta de 3%-6%, dijo el banco central en un comunicado.
El crecimiento se está desacelerando después de que una sequía golpeó al sector agrícola, uno de los principales exportadores de Uruguay, lo que llevó al banco central a flexibilizar la política para estimular la economía, dijo en una entrevista Alberto Landeira, economista de la corredora Puente.
“La razón principal por la que el banco central comenzó a recortar las tasas antes que otros países es porque tenemos una brecha de producción negativa”, dijo Landeira. “La sequía está teniendo un gran impacto en la economía”.
Los principales bancos centrales de la región han mantenido las tasas de interés en máximos de varios años, incluso cuando la inflación retrocede gradualmente después de alcanzar los dos dígitos en varios países durante 2022. A los formuladores de políticas les preocupa que una relajación prematura pueda chocar con un aumento en los precios al consumidor que dañaría su credibilidad. En el vecino Brasil, las consecuencias económicas de las altas tasas de interés impulsaron al presidente Luiz Inacio Lula da Silva a reprender públicamente a su banco central por estrangular el crecimiento.
El banco central de Uruguay bajo el liderazgo del economista Diego Labat ha sido criticado por los exportadores que dicen que los altos costos de endeudamiento están contribuyendo a una moneda sobrevaluada. El peso se ha apreciado 2,3% este año, luego de ganar alrededor de 12% en 2022.
Una moneda fuerte ha ayudado a frenar la inflación, que cayó a un mínimo de 20 meses del 7,3% en marzo. Aun así, los participantes del mercado se muestran escépticos de que los formuladores de políticas alcancen su objetivo, y la encuesta mensual más reciente de analistas del banco central pronosticó una inflación de 6,95% en diciembre de 2024.