Vinci y ACS, las compañías lideran la obra exterior presionadas por la armada china
lunes, 15 de julio de 2024
Siete compañías españolas se sitúan entre las 100 más grandes del mundo en un mapa dominado por corporaciones chinas
Expansión - Madrid
Un año más, el mapa mundial de la construcción sigue dominado por las grandes corporaciones chinas con ocho representantes entre las diez mayores del mundo por cifra de facturación. La más grande del planeta es China State Construction Engineering Corporation (CSCEC) con unos ingresos en 2023 de US$ 320.000 millones (unos 293.400 millones de euros). La primera constructora occidental en el ránking es la francesa Vinci (la más valiosa en Bolsa), con ingresos de US$74.459 millones, cuatro veces más pequeña que el líder chino, pero que junto ACS, conserva un año más el liderazgo del ránking constructor exterior.
"La armada china compite cada vez más en el exterior pero sigue dependiendo de la demanda interna. El negocio de la construcción mantiene un problema de márgenes", destaca Javier Parada, socio de Deloitte encargado de elaborar el informe Gpoc del sector al que ha tenido acceso EXPANSIÓN.
El gigante francés factura fuera US$42.426 millones, US$7.000 millones más que ACS (US$35.000 millones) gracias a la potencia de fuego que le dio en 2021 la compra de la división industrial del grupo español y al crecimiento en el negocio de concesiones donde la gala también figura como líder mundial.
En términos relativos, ACS es la constructora internacional más grande, ya que 90% de su negocio viene de fuera, principalmente EEUU. La constructora china más internacional es CCCC, que ocupa el cuarto puesto con una facturación de US$16.801 millones, que representa 15% de sus ingresos.
En 2023, la rentabilidad del sector también se ha resentido. En la parte constructora, las empresas con mejores márgenes son las estadounidense Pulte y Lennar, por su alto componente de edificación. De promedio, los márgenes del sector sobre ebit se sitúan en 5,4%, inferior en dos décimas a los de 2022. Las dos primeras españolas en este ránking son ACS (2,9%) y Acciona (2,4%), en el puesto 22 y 25, respectivamente.
La vocación internacional de CCCC quedó refrendada justo antes de declararse la pandemia del Covid cuando se convirtió en el mayor accionista de la gallega Puentes. Otra constructora china, CRCC (tercera en el ranking con US$161.000 millones de ingresos), es la dueña de la madrileña Aldesa. Más recientemente, CCCC ha entrado indirectamente en el capital de Duro Felguera a través de la portuguesa Mota Engil, donde la corporación china es el segundo mayor accionista con 32%.
A pesar de las tensiones diplomáticas con las grandes potencias occidentales, los grupos estatales chinos han conseguido romper barreras de entrada con la compra de empresas locales o gracias al poder de financiación del Gobierno chino. En EEUU, CSCEC figura entre los grandes contratistas del país y ha comprado firmas locales como la neoyorquina Plaza.
En Australia, China adquirió a ACS el contratista de obra civil Jonh Holland. En ocasiones, las tensiones diplomáticas han dado lugar a enfrentamientos resueltos en contra de intereses chinos. Canadá se opuso en 2018 a que CCCC comprase la constructora local Aecon, mientras que Australia bloqueó la adquisición de la firma Probuild en 2021 por CSCEC.
Estos enfrentamientos también son visibles en otras latitudes como Latinoamérica. En Colombia, por ejemplo, Acciona y Sacyr llevan meses demandando que las autoridades se pronuncien sobre un conflicto de interés que afecta al contrato para construir y explotar la segunda línea del metro de Bogotá, un proyecto de 6.500 millones de euros (US$7088 millones). El consorcio formado por los dos grupos españoles ha pedido que se descalifiquen a las constructoras chinas por sus vínculos directos e indirectos societarios. Puja por el mismo proyecto China Railway Construction Corporation (CRCC) y Mota-Engil. También han formado consorcio China Harbour Engineering Company y Xi'an Rail Transportation Group. Actualmente son los encargados de las obras de construcción y explotación de la Línea 1 del Metro de Bogotá. El tercer consorcio chino lo conforman China Railway Construction Electrification Bureau Group y CRCC, la dueña de Aldesa.
En Oriente Medio, los grupos chinos también rivalizan con los españoles, tanto en obra civil como industrial. China es rival de Acciona y FCC en la ampliación del metro de Riad y Técnicas Reunidas se enfrenta a China en los trabajos para Aramco. La ingeniería española ha optado por aliarse al gigante Sinopec para trabajar en esa parte del mundo.