Debido al empeoramiento del negocio, Vodafone estudia reducir su plantilla en España
viernes, 23 de noviembre de 2018
Vodafone España ha acometido en los últimos años dos procesos de reducción de plantilla
Expansión - Madrid
Vodafone España, el grupo de telecomunicaciones filial de la multinacional británica, está estudiando acometer una reducción de su plantilla en nuestro país, según han señalado a EXPANSIÓN fuentes cercanas al proceso. Portavoces oficiales de Vodafone han declinado comentar esta información.
Actualmente, el grupo cuenta en España con una plantilla de unos 5.300 empleados, entre las tres compañías que lo forman: Vodafone España, que se ocupa de dar el servicio fijo; Vodafone Ono, que ofrece el servicio móvil y Vodafone Servicios, que se encarga de la comercialización y la facturación.
La decisión de iniciar el estudio de esta medida obedece al empeoramiento del panorama competitivo general en el sector de telecomunicaciones en España, debido a la guerra de precios que arrastra el sector desde las Navidades del año pasado y que se ha acentuado sustancialmente este verano, impactando en la cartera de clientes, los ingresos y, sobre todo, en los márgenes del grupo, como se ha puesto de manifiesto en los últimos resultados trimestrales.
Vodafone España redujo los ingresos por servicios un 7,2% en el trimestre de julio a septiembre, hasta 1.091 millones, con la pérdida de 98.000 clientes de televisión, y el ebitda cayó un 27,8% en el semestre abril-septiembre.
Además, António Coimbra, el consejero delegado del grupo, reconoció que en los próximos trimestres los resultados estarán "alineados" con los de este periodo, "porque los costes están ahí pero los ingresos no los tienes". Y es que Vodafone aún va a tener que seguir haciendo frente a una parte importante de los costes del fútbol, ya que mantiene durante esta temporada el paquete de 8 partidos por jornada, un coste de se mantendrá hasta el primer trimestre del próximo ejercicio.
Esa situación sobrevenida se suma a otra que ya no era óptima, puesto que Vodafone España registró unas pérdidas netas de 180,3 millones de euros en el ejercicio 2017-18 que finalizó el pasado marzo. Esas pérdidas ya supusieron un aumento del 36% respecto a los números rojos del ejercicio 2016-17.
Reposicionamiento
En este panorama, la compañía está inmersa en un proceso de reposicionamiento corporativo con un triple objetivo: volver a tener tarifas competitivas, una tarea que se inició el pasado mayo y que aún continúa y que está en la base de una parte de la caída de ingresos; la aceleración de la digitalización del grupo, como ha puesto de manifiesto el lanzamiento de Vodafone Bit, una gama de tarifas que sólo se atienden por canales digitales y que requieren mucho menos personal; y la simplificación de la estructura y de los procesos, en la que se enmarcaría el plan de reducción de plantilla.
De hecho, el grupo Vodafone anunció el pasado 13 de noviembre su intención de recortar sus costes operativos en Europa en 1.200 millones de euros en los próximos tres años, hasta el ejercicio 2020-21. De ese recorte, los sectores más afectados serán el área de sistemas, que recortará los gastos operativos en un 40%, y los del área comercial que reducirá sus costes en un 30%. También afectará a la cadena de tiendas (un 15% de reducción) y el área de soporte y staff (-25%)
Los representantes de los trabajadores consideran que cualquier medida concreta se tomaría una vez concluida la campaña de Navidad, una época fundamental para las ventas y que podría verse enturbiada con la conflictividad propia de estos procesos.
Vodafone España ha acometido en los últimos años dos procesos de reducción de plantilla, uno en 2013 y otro en 2015, ambos bajo la dirección de Coimbra, que fue nombrado CEO en septiembre de 2012. El primer ERE se planteó en febrero de 2013 por la caída de negocio y de márgenes por la crisis y afectó a 900 empleados de los 4.300 que tenía entonces. El segundo, debido a las redundancias de la integración de Ono, se pactó en octubre de 2015 y afectó a 1.057 empleados.