Se invertirá $1 billón en cada uno de los cinco Contratos Plan de este año
jueves, 26 de marzo de 2015
Mario Chaves Restrepo
¿Qué son los Contratos Plan?
Los Contratos Plan son una herramienta de gestión que nos ayuda a mejorar la relación entre el gobierno y las entidades territoriales. Con esta figura uno puede tener una convergencia de fuentes de financiación como lo es el presupuesto de la Nación, las regalías, los recursos propios de los municipios y departamentos, pero lo más importante de esta figura es que permite una planeación conjunta, desde el territorio, y unos mecanismos de gestión en conjunto para sacar adelante los proyectos de impacto regional. En este momento, estamos trabajando en una segunda ola de estos contratos.
¿En qué sectores trabajan?
En una primera etapa, nos concentramos en muchos sectores. Teníamos desde proyectos sociales hasta infraestructura vial. En esos, movimos $12,5 billones contando las concesiones de 4G, y $7,3 billones si no las contamos. A partir del Conpes 3822 de 2014, en el cual se recopilan las experiencias de los primeros siete Contratos Plan (Tolima, Cauca, Arauca, Nariño, Santander, Boyacá y Atrato Gran Darién), hicimos un gran diagnóstico. Vimos que era un figura con una buena aceptación, pero que teníamos muchas oportunidades de mejora. Estábamos en muchos sectores, teníamos atomizada la inversión, muchas veces en proyectos de bajo impacto. Lo que hicimos fue enfocarnos en infraestructura para esta nueva etapa.
Además del foco en infraestructura, ¿qué otro cambio hay para esta nueva etapa?
Anteriormente, no había reglas claras sobre la financiación de los proyectos, hubo iniciativas en las que el Gobierno puso más que en otras. Para hacerlo equitativo, en esta nueva etapa decidimos que la regla de cofinanciación será de 60% recursos de la Nación y 40% de los municipios y departamentos. Me parece que esto es muy importante porque obliga a priorizar las obras en tiempos en los que la situación fiscal ya no es tan cómoda.
¿Dónde estará concentrada esa segundo ola de los Contratos Plan?
Se focalizan en zonas en donde tenemos grandes brechas de infraestructura. Hicimos un ejercicio jugoso de priorización, y ya estamos en negociación con Amazonas, Norte de Santander, Cesar, Meta y estamos arrancando con Putumayo. La idea es negociar y firmar estos acuerdos en el primer semestre del año.
¿Qué obras se harán con estos nuevos Contratos Plan?
Todavía estamos en proceso de negociación, pero uno puede ver que en Cesar, los ejes centrales son inversiones fuertes en todas las vías secundarias y un cierre de brechas educativas. En Norte de Santander, estamos trabajando un tema de infraestructura vial. El más importante es la vía Astilleros-Tibú-Convención-La Mata, que casi es la principal vía del Catatumbo, que es la zona donde nos estamos concentrando.
En Amazonas, estamos planeando inversiones en infraestructura educativa, en acueductos y, de la mano de la Aerocivil, estamos con todo el tema de aeródromos y aeropuertos, porque es un departamento muy amplio, en el que por un tema ambiental es imposible construir carreteras.
¿Cuánto invertirán en estas obras?
Eso depende mucho de qué recursos tenga cada departamento y de los proyectos que presente, pero estamos viendo contratos plan que están en promedio entre $800.000 millones y $1 billón. En un contrato de esta cuantía, el Gobierno pondrá $600.000 millones, y la entidad territorial, $400.000 millones.
¿Qué viene para 2016?
Tenemos planeado hacer otros cinco Contratos Plan el próximo año. Aún es pronto para decir dónde serán, pero me gustaría que departamentos como Chocó y La Guajira, donde tenemos bastantes brechas sociales, participaran del proyecto.
La ejecución de la primera etapa
De acuerdo con el gerente de Contratos Plan, Juan Carlos Mojica, la ejecución de la primera ola de los contratos plan debe medirse bajo dos indicadores. El primero de ellos es la ejecución financiera, donde el indicador llega a un total de 52%. La segunda medida es al ejecución física, donde van en 20%. Según Mojica, esta diferencia se origina en el hecho de que una vez ellos aseguran los recursos para una obra, los dan como ejecutados, mientras que la ejecución física depende de la construcción real del proyecto.