Código abierto, ¿cómo influye en la vida de los ciudadanos?
sábado, 15 de septiembre de 2018
Empresas han entendido la importancia que tiene la práctica.
Jaime Bejarano
Con la llegada tanto de Internet como de las nuevas tecnologías también han evolucionado los diferentes modelos de consumo en los últimos años, de ahí que actualmente sea muy común hablar de la economía colaborativa.
Uber, Airbnb y Facebook son solo algunos ejemplos de esta dinámica que promueve el desarrollo a través de la participación de diferentes actores de un ecosistema para darle mejoras a cada uno de los servicios que entregan.
Estas opciones mayoritariamente se sustentan y tienen su génesis en las plataformas tecnológicas ‘open source’ o de código abierto.
En esta industria, las empresas que crean soluciones de código abierto empresarial, han entendido la importancia de incentivar estas prácticas a través de los beneficios de un modelo que aporta, de manera ágil, las ventajas de la innovación del ‘open source’ con garantía del soporte de mejor nivel mundial, toda la certeza de las mejores y más exigentes prácticas de seguridad y la certeza de portabilidad, libertad y transparencia que solo brinda a las empresas el modelo ‘Open source’ liderado por Red Hat.
Es por eso que no solo empresas privadas de distintos sectores le han apostado a trabajar con un modelo de desarrollo de software basado en la colaboración abierta, sino que también lo están haciendo algunas entidades públicas y gobiernos. ¿Uno de los objetivos?, brindarle mayor calidad de vida a los ciudadanos y una experiencia práctica, eficiente e inmediata.
Una muestra de ello es Estonia, el primer país en consolidarse 100% digital. Esta nación báltica es un ejemplo claro de cómo el uso de software de código abierto, por su transparencia y calidad, es la mejor posibilidad cuando de desarrollo se trata, pues una vez cualquier proceso está a luz de distintas figuras de contraloría, la corrupción y la burocracia disminuyen; muestra de eso es que este modelo está siendo adaptado para interconectarlo con países vecinos como Finlandia.
Y sí, es que gracias al código abierto, sin importar desde qué parte se esté conectado, a un solo clic usted puede hacer cosas que van desde renovar el pasaporte, declarar impuestos y hasta crear una empresa. De hecho, gracias al ‘open source’, hoy dividir la cuenta de un restaurante al que fue con sus amigos es posible sin sacar la billetera.
En ese sentido, el reto para países como Colombia es continuar el camino hacia la transformación digital de la mano de herramientas que reduzcan el costo de adquisición de tecnología y contribuyan a la eficiencia operativa de manera segura.
De acuerdo con el más reciente estudio realizado por la Corporación Colombia Digital, actualmente en el país solo 55% de las entidades públicas cumple con los lineamientos de Gobierno en Línea para que los ciudadanos puedan recibir mejores servicios gracias a la tecnología.
Lo anterior nos deja ver que, al cierre de 2017, un poco menos de la mitad de las organizaciones que trabajan con el gobierno colombiano tienen un espacio para llegar al nivel de madurez que requiere una sociedad digital como la que se ve en algunos países desarrollados.
Si bien la transformación digital es un proceso que exige a las naciones distintos esfuerzos y que implica un proceso, este es el momento para que las organizaciones den el primer paso y apuesten por una infraestructura convergente que pueda brindar mayor agilidad, innovación, costo/eficiencia y calidad de vida a sus ciudadanos, el ecosistema de Red Hat está dispuesto a cooperar para construir de manera asertiva esta nueva sociedad con las tecnologías abierta y no propietarias que lideran hoy la transformación del mundo.