Empresas colombianas que están en metaverso y le apuestan a la innovación digital

El metaverso, en la actualidad, tiene un mercado de valor extendido de US$41.220 millones, según datos reportados por Statista. Cifra que ha hecho que empresas como Facebook, hayan decidido cambiar su nombre por Meta e invertir cerca de US$18.500 millones, destinados a su división de realidad virtual y realidad aumentada.

Otros gigantes tecnológicos que compiten en el mercado mencionado son Google, Nvidia y Microsoft.

Sin embargo, en Colombia, las empresas no se han quedado atrás y algunas han hecho incursiones en el metaverso.

Conconcreto es una de ellas, y tras adquirir un espacio o parcela en el mundo de realidad virtual instaló una oficina de ventas para sus proyectos de vivienda del mundo real, en el que los usuarios del metaverso pueden tener la experiencia de estar en un sitio de ventas de la cotidianidad.

“ El metaverso fue una iniciativa que empezó hace tal vez un año y medio en el boom de esos canales. Nosotros, siempre, buscamos potenciar el negocio con innovación y sostenibilidad. Por ello implementamos medidas para eliminar las barreras geográficas y generar más acceso, nuestro espacio en ese mundo sigue activo”, indicó Alejandra Pardo de Francisco, líder del área de innovación, investigación y desarrollo de Conconcreto.

Para esta firma, la realidad virtual, por el momento, se ha convertido en un canal que le permite llegar a un target que pasa tiempo en el metaverso, y puede llegar a interesarle adquirir un bien inmueble en ciudades como Bogotá, Barranquilla o Medellín.

El mundo virtual tuvo un valor de US$41.220 millones en 2021 y espera quintuplicarse en 2030, según se lee en un informe de Bloomberg.

Por ello, Offcorss, desde inicios de 2022, le hizo una apuesta a este renglón de la innovación tecnológica con una tienda en el metaverso, donde los clientes tienen la opción de recorrer el lugar junto a sus mascotas y ver la colección que está disponible en los canales tradicionales y en formato tridimensional.

Yanet Londoño Diosa, Ceo de Offcorss, aseguró que “la realidad virtual le brinda una gran ventaja a los clientes, ya que se pueden equivocar muchas veces sin asumir un riesgo bastante significativo en términos de dinero, porque si algo no gusta se puede modificar inmediatamente. Y como marca podemos potenciar aquello que nuestros públicos prefieren”.

El centro comercial Plaza de las Américas también se unió al renglón tecnológico virtual, pues en este espacio fue planeado en principio para simplificar el registro de facturas de los clientes. Ellos, también, tienen la posibilidad de hacer un recorrido virtual por las tiendas, ya que es un espejo de las tiendas físicas.

“Las visitas dependen de las activaciones que se realicen, por lo general regalamos boletas de cine, premios y demás para incentivar a las personas primero a no hacer fila para registrar sus facturas y, segundo, a conocer y hacer un recorrido de manera virtual. En lo corrido del año, el centro comercial ha tenido un promedio de 1.500 clics por mes”, aseguró Ana Isabel Coba, gerente de Plaza de las Américas.

El sector educativo no se queda atrás. La Universidad Pontificia Bolivariana (UPB), de la mano de DreamHouse Studios, tiene un espacio en el metaverso, el cual en principio está dedicado a establecer cómo la realidad virtual puede considerarse como una herramienta para el sector educativo sin necesidad de reemplazar la formación que se conoce en la actualidad.

“Nuestra propuesta es desarrollar una plataforma que nos permitiera analizar el comportamiento de los alumnos en el mundo virtual, es decir, si efectivamente aprenden más o mejoran sus competencias”, afirmó Rodrigo Hincapié, decano de ingeniería de la Universidad Pontificia Bolivariana.

Otras empresas como Sajú, Postobón y Ramo han ingresado al mundo virtual, a través de los Ntfs, para promocionar productos y hacer lanzamientos de esto. Los Ntfs son tokenes utilizados para representar la propiedad de elementos como arte, objetos de colección o bienes raíces.