Ocio

Aprenda cómo combinar diferentes tipos de quesos con un buen vino

Lina María Ruiz J.

Los vinos y los quesos son una buena combinación, siempre y cuando sepa cómo emparejarlos para disfrutar del sabor de ambos, sin que ninguno se vea minimizado.

Para disfrutar una tarde de amigos, para una ocasión especial en pareja, entre otros momentos, esta combinación resulta ser un acompañamiento perfecto, además de exquisito. De acuerdo con Andrea Fernández, experta en vinos, “lo más importante en la búsqueda de combinaciones entre queso y vino es que ninguno de los dos debe imponerse al otro, esto es lo que se conoce como equilibrio o balance”.

Lo que se debe tener en cuenta, según los expertos, es que un queso muy complejo no debe acompañarse con un vino igualmente complejo, porque la intensa gama de aromas y sabores que estos despliegan choca con una, no menos amplia, escala de estos mismos atributos en un vino muy elaborado. Idealmente, quesos intensos en complejidad irían mucho mejor con vinos jóvenes.

Reglas a la hora de combinar
Sin importar el color, existe una regla básica a seguir y es que entre más blanco y fresco sea un queso, más frutal y suave deberá ser el vino; y entre más oscuro y duro el queso, el vino deberá ser más fuerte . Por lo tanto, los quesos fuertes y concentrados se deben acompañar con un Chardonay o un Pinot Noir. Los quesos azules se acompañan bien con vinos dulces como el Sauternes o el Oporto. “En los casos en que se opta por la tabla de quesos, la mejor opción es un tinto joven, puesto que este ayudará a lograr un mejor equilibrio entre el y los variados sabores de los quesos elegidos”, señala el chef de La Cigale, Francois Cornelis.

En ciertas ocasiones, la combinación ideal se basa en el contraste de los sabores. Por ejemplo, quesos muy salados contrastan con vinos dulces. Otro ejemplo sería con los quesos picantes que se acompañan muy bien con vinos picantes. En cambio, los quesos grasosos se complementan con vinos ácidos.

Por otro lado, los quesos blandos maduros y suaves, como el Brie, el Camembert, los quesos de cabra, entre otros, se acompañan con Chardonay, Champagne, Rieslieng y con Sauvignon Blanc.

El queso Manchego se acompaña mejor con Cabernet Sauvignon. Entre tanto, el famoso queso inglés Cheddar, se combina perfecto con vinos afrutados, mientras que el Gruyere suizo va muy bien con vino blanco. El queso italiano Provolone, semi-duro y alto en grasa, es ideal con Cabernet Sauvignon.

El queso Gouda o tipo Gouda, también conocido como holandés, se marida perfectamente con un Merlot. Por último el Parmesano se acompaña muy bien con un vino tinto o también con un vino blanco, como por ejemplo un Chardonay agudo.

“El vino tiene su hora, su día, y su compañía; tanto en los alimentos como con las personas con las cuales se van a compartir. Siempre será mejor blanco o rosado al medio día, los sábados o domingos o para el almuerzo. Siempre será mejor el vino tinto en la noche para la cena o para acompañar platillos ligeros como quesos”, concluye Mauricio Bermúdez, enólogo de Gato Dumas.

El queso Camembert es muy consumido en Colombia y se combina muy bien con champagne.

El vino blanco es la mejor opción para disfrutar del sabor del queso suizo Gruyere.

El fuerte sabor del queso azul es contrastado por un vino dulce como el Oporto.

La Opinión

Francois Cornelis
Chef y dueño de La Cigale

“Lo más importante a lahora de acompañar un queso con vino es que ambos se complementen en texturay suavidad. No se deben combinar dos sabores fuertes”.