Bogotá consume casi 37% del vino que entra al país y el tinto es el más demandado
lunes, 23 de mayo de 2022
La cifra general de compra se ha contraído este año por el regreso de los consumidores a bares y restaurantes tras la pandemia
El vino ha acompañado la mesa de los consumidores por siglos, no solo porque puede ser el complemento ideal de algunas preparaciones, sino también porque es una excusa para compartir con amigos o familia, pero ¿qué tan buenos bebedores son los colombianos?
Cifras de Nielsen muestran que para el año móvil mayo 2021 a abril 2022, se vendieron más de 14,8 millones de litros de vino en los supermercados de cadena del país. La cifra se contrajo 5% frente a los resultados en el año de la pandemia.
Jose Andrés García, director de efectividad comercial de Dislicores explica que el cambio en la cifra se debe a que durante la pandemia “la ocasión de consumo se trasladó a los hogares” y si antes se consumía una copa en un restaurante, al estar en casa los consumidores compraban una botella.
“La reapertura de este año ha hecho que las personas vuelvan a un ritmo normal de consumo. Si vemos dónde se compra más vino las líderes son las ciudades principales”, dice García.
La Federación nacional de Departamentos reporta que Bogotá consume más de 37% del vino que ingresa al país, seguido por Antioquia que llega a 19% y Valle con 11,3%.
Ahora, en cuanto a los tipos de vinos más demandados, el tinto se lleva todo el mérito con más de 62% del consumo nacional; en segundo lugar se ubican los blancos con 11% y los espumosos cierran el top tres con 7%.
“Para saber qué tipo de vino prefiere tiene que ponerse a probar, saber qué tipo de uva está tomando, qué tipo de proceso y producción tiene y así va refinando el gusto, es algo muy personal”, concluye Manuel Álvarez, cofundador de El Kiosko.
Los mejores compradores del mundo
Al revisar cuáles son los países que más toman vino, cifras de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) ubican a Estados Unidos en primer lugar con 33 millones de hectolitros; le siguen Francia e Italia con 25,2 millones y 24,2 millones de hectolitros respectivamente. Algo que ha impulsado el consumo de esta bebida en estos últimos dos países, es su implementación en la preparación de varios de sus platillos gastronómicos tradicionales. De la región solo aparece Argentina, en noveno lugar, con 8,4 millones de hectolitros.