Cada generación tiene lo suyo en un mundo empresarial de millennials y centennials
martes, 8 de noviembre de 2022
Ana Sarmiento, TEDex speaker y Top 100 Mujeres Líderes de España, presenta su libro como uno dedicado a los trabajadores que no han nacido aún
Lewis Acuña
Los mayores de 40 no inspiran a las nuevas generaciones. Desde su punto de vista, mirándolos, piensan que no desean vivir en un trabajo estresados, pagando deudas; porque esos referentes no son atractivos. Hay un desánimo general para aguantar cosas que ellos sí soportaron.
Están más dispuestos a luchar por las condiciones laborales que quieren y por la realización personal en el trabajo de lo que ellos estuvieron dispuestos. Eso es una diferencia clarísima. Para los mayores la definición del éxito estaba marcada por lo que podían alcanzar a través de años de trabajo en una misma empresa. Carro, casa, beca, vacaciones en Disneylandia y ya está. Con eso la vida ya era feliz. Para los jóvenes es totalmente diferente. Su definición está en la realización, en encontrar ese propósito en el trabajo y la empresa.
¿Cómo cambia el escenario laboral? Por un lado ya no están tan inclinados a buscar trabajo en las alternativas tradicionales. Ahora hay muchísimas más opciones. Se encaminan a dos sectores. Las startups, más tecnológicas, más modernas, con mayor flexibilidad, construidas con los valores propios de su generación. El otro, es en la llamada “gig economy” que es el nombre con el que designan al trabajo independiente, ahora potenciado con el uso de las plataformas que permite encontrar trabajo en cualquier lugar del mundo. Monetizan su talento a través de una conexión de internet.
Esas son solo tres de las conclusiones de “un libro dedicado a los trabajadores que no han nacido aún” como presenta Ana Sarmiento su libro “Cada generación tiene lo suyo. Las empresas y el trabajo en un mundo de millennials y centennials”.
Ella es TEDex speaker y Top 100 Mujeres Líderes de España. Sus mas de 2000 horas de coach certificada y su carrera de administradora de empresas con Máster en finanzas; los ha enfocado en programas de liderazgo y engagment en compañías del Fortune 100.
Asegura que su libro es una forma de contar y hacer reflexión empresarial sobre la forma en que se llevan los negocios sin darse cuenta cómo ha cambiado el mundo laboral y el impacto que eso tiene. “Me preocupa que estamos teniendo unas culturas organizacionales que no están fomentando la atracción del talento. La gente ya no quiere trabajar en una empresa. Les da vértigo a las generaciones nuevas levantarse y llevar una vida tradicional como la que han llevado los mayores de 40 años. ¿Qué quiere decir esto? Que no se está logrando que la gente quiera trabajar en las empresas y las empresas sin talento son ciudades fantasmas: se mueren”.
Para la autora su causa es la reivindicación del trabajo mancomunado e intergeneracional en beneficio de los empleos del futuro. Un punto de encuentro entre la modernización y los valores tradicionales de la fuerza laboral. “Es un recuento de qué es lo que ha pasado a lo largo de la historia. Que nosotros lo que tenemos en este momento se lo debemos a generaciones anteriores -que también nos olvidamos de eso- pero que el futuro está en manos de las generaciones que vienen detrás de nosotros y que estamos todos conectados a través de la empresa. Si logramos que las empresas que tenemos operen de la forma correcta podrán trascender al futuro y vamos a tener trabajo para mucha gente más”, dice.
Empresas en tiempos de emprendimientos es un tema recurrente en su análisis. “Según las estadísticas en 2025 un 75% de la fuerza laboral va a ser millennial. ¿Qué pasa si toda esa fuerza laboral decide que quiere trabajar por cuenta propia o que quiere trabajar en una startup?. Lo que mas me preocupa cuando hablamos de emprendimiento es que en la gran mayoría están pensados como autoempleo para conseguir la propia subsistencia pero casi no ofrece empleo, no transmite conocimiento y abre una brecha con las generaciones que vienen detrás de ellos. Pensando en el futuro ¿Qué pasará cuándo se cumplan 50 o 100 años de autoempleo? El impacto se verá posiblemente en que no vamos a tener empresa por dos razones. Una, que nos estamos autoempleando y no estamos generando empleo. Dos, las empresas que están generando empleo no están teniendo la visión ni para atraer ni para fidelizar a esos jóvenes y va a llegar un momento en que no van a tener con quien trabajar”.
Para bailar tango se necesitan dos. Esa puede ser otra conclusión del libro ya que deja ver con optimismo que hay muchas ventajas de trabajar con una empresa que los jóvenes pueden descubrir y éstas, a su vez, deben asumir la responsabilidad de no precarizar las condiciones y darle al talento un lugar prioritario para potencializarlo.