#Con-Texto | Más valen cuatro ruedas rodando que un par de pies esperando
lunes, 6 de febrero de 2023
El humor es inteligencia, dicen, y las dos emanan de él a raudales. No es una consideración, son testimonios de cientos de alumnos de varias de las universidades más importantes del país
Lewis Acuña
Juan se enamora de una mujer cuyo exnovio es un fisicoculturista. Ya de por sí una bandera roja -o naranja oscura, por lo menos-. El conquistarla lo asume como otro de los duros retos a los que se ha enfrentado en su vida, aunque este incluya el recuerdo de un “Adonis” y la dureza sean unos músculos de exhibición.
“En honor a la objetividad y dejando la modestia aparte -se dice- tengo mi sex appeal, aunque no sea necesariamente mi físico en perfectas condiciones”. De hecho, dista incluso de lo que se consideran condiciones normales. Pero esto no lo detendría, ya se había enfrentando a esa verdad en muchos escenarios.
Desde niño. “Yo no contrato personas por su condición, yo contrato cerebros” escucharía tiempo después al obtener el preciado cargo de ejecutivo en una prestigiosa empresa de marketing, área en la que tiene un master.
El humor es inteligencia, dicen, y las dos emanan de él a raudales. No es una consideración, son testimonios de cientos de alumnos de varias de las universidades más importantes del país que lo postularon en 2016 como uno de los mejores profesores de mercadeo en Colombia.
En su especialidad -el marketing- sabe que hay muchos factores que se pueden trabajar para ser más atractivo. Es clara la idea de que “puede que no tengas el mejor producto, pero si lo sabes vender, la historia es otra”. Así que Juan da un paso adelante, ese tan importante que muchas veces no tiene nada que ver con nuestros pies sino con nuestra actitud y acciones.
Recordaría las palabras de su mamá que tanto trasegó por su bienestar entre hospitales y diagnósticos sobre la enfermedad que inmovilizaba a su hijo desde los cinco o seis años. La misma por la que le afirmaron en algún momento que él no pasaría de la adolescencia. “Hágale que siempre va a encontrar quien le dé la mano”.
Juan sabe cuál es la mano que desea recibir y pedir en su vida. Sabe que las historias son un medio poderoso para llegar al corazón de las personas. Es la razón por la que con nueve de ellas en su libro “A fuerza de discapacidad” cuenta la suya. Una de ellas la de Dora, su esposa hace 14 años, quien tiene un exnovio fisicoculturista.
“Más valen cuatro ruedas rodando, que un par de pies esperando”, se dijo.