Consejos para iniciar y aumentar el valor de una colección de arte
viernes, 23 de junio de 2017
David Jáuregui Sarmiento
Según Julia Serrano, representante de artistas emergentes; y Ricardo Perdomo, coordinador de investigación del Art Bureau of Latin American Certifications (Ablac), el primer consejo aunque aparentemente obvio, es el más importante: hay que buscar asesoría.
Solamente a través de expertos es posible valorar económicamente las obras que tenemos en casa, y así mismo son ellos los que tienen el tiempo y las formas para poner una obra en el mercado. Son, en sus propias palabras, como corredores de bolsa con la diferencia de que el título valor está colgado en la pared.
“Una colección se alimenta, entre otras formas, a través de una compañía consultora de arte. Se parece a tener un corredor de bolsa, solo que las acciones están colgadas en la pared. Lo primero que revisa una consultora es la importancia de las piezas, dado por su valor histórico, importancia del artista, conservación de las piezas y, por ejemplo, si fue trabajada en lápiz u óleo sobre lienzo, para que así pueda pasar de generación en generación”, explicó Perdomo.
Además, otro aspecto importante es tener dinero suficiente para solventar el costo de hacer una colección. Consultoras como Serrano dicen que la capacidad económica de los clientes es fundamental para dedicarse al mundo de las colecciones de arte, pero que es algo que se puede lograr si se empieza con artistas emergentes.
“Depende del nivel económico del coleccionista las herramientas que va a utilizar. Puede, por ejemplo, dirigirse a casas de subastas para valorar su obra sin necesidad de llegar a una consultora o acercarse al Banco de La República para buscar asesorías. También puede buscar curadores privados o artistas que apenas empiezan su carrera”, aseguró Julia Serrano.
Sin embargo, para Perdomo, no hay manera de hacer una colección sin hacer un presupuesto anual para la compra de arte, pues “para llegar a una colección real lo mínimo es tener 10 obras de 10 diferentes artistas y ese punto de equilibrio se consigue dedicando una parte del presupuesto anual al mercado del arte”.
Así mismo, los expertos reconocen que una colección implica mucho más que compra y venta de obras de arte. También tiene que ver con apoyar al artista, incluso intentar conocerlo personalmente, para que su trabajo avance con más éxito entre galeristas y otros coleccionistas. De esta manera, como explican en el portal especializado artprice.com, una artista como la pintora cubana Carmen Herrera, pudo pasar de cotizar una de sus obras en menos de dos años de US$10.000 a US$1,2 millones.
Otra recomendación fundamental para tener en cuenta es nunca adquirir piezas que no tengan certificado de autenticidad ni récord tributario, pues de lo contrario su valor en el mercado se hace casi nulo: por un lado porque demostrar su autenticidad se complica demasiado; y por el otro, porque si ha tributado quiere decir que se han registrado las sumas de dinero que sus dueños han pagado por una obra.
Por último, hay que tener en cuenta que las comisionistas de arte, dependiendo de su trabajo y su reconocimiento a nivel internacional, pueden cobrar entre 20% y 50% de comisión sobre una obra, como sería el caso de la famosa casa de subastas Christie’s.
“Las consultoras trabajan por comisiones de acuerdo al rendimiento económico de las piezas en mercado y casas de subastas, y encontrando opciones de transar arte”, concluyó Perdomo.
La opinión
Ricardo Perdomo
Investigador de la consultora de arte Ablac
“El arte es como una inversión en la Bolsa de Valores, es como tener acciones en la pared. Mientras se tiene la obra se puede disfrutar. ”.