Davivienda y Seguros Bolívar lanzan el libro de arte en homenaje a Luciano Jaramillo
miércoles, 22 de noviembre de 2023
Esta publicación cuenta con un extenso ensayo visual que hace un recorrido cronológico por los tres grandes momentos de la producción artística
Este año, el libro de arte que publican anualmente Davivienda y Seguros Bolivar, está dedicado a Luciano Jaramillo.
Este pintor caldense se destacó por su intensidad expresiva y emotiva, repleta de iconografías locales, identificadas popularmente mediante la imagen mediática de los mitos modernos de su tiempo: reinas de belleza, ciclistas, futbolistas y héroes históricos como Simón Bolívar. Además, de simbologías personales como perros, palomas, payasos tristes y familias viendo TV.
Según informan las compañías, no existía hasta el momento una publicación que documentara por completo la obra de Luciano Jaramillo, por esto, consideraron de suma relevancia incluir este nombre dentro de su colección homenaje a los Grandes Maestros del Arte Colombiano.
Esta publicación del grupo Bolívar Davivienda cuenta con un extenso ensayo visual que hace un recorrido cronológico por los tres grandes momentos de la producción artística de Luciano Jaramillo, respetando el tránsito fluido, libre y recurrente que siempre tuvo entre el oficio de la pintura y el oficio del dibujo.
Enriquecen este libro un ensayo histórico e interpretativo a cargo de Nicolás Gómez Echeverriy otro texto enfocado en el contexto político y social escrito por Sylvia Suárez Segura, además de una completa y extensa cronología de su vida.
Luciano Jaramillo es uno de los más destacados artistas colombianos del siglo XX. Inició su formación temprana como autodidacta, en 1956, y con 16 años, realizó su primera exposición individual en la sala Gregorio Velázquez de la Biblioteca Nacional y fue presentado por Gabriel Giraldo Jaramillo como “el más joven de los maestros”.
A lo largo de su carrera, resistió con valentía a la complacencia de las tendencias de su tiempo, tanto a la abstracción de los años cincuenta y sesenta, como a la figuración hiperrealista de los años setenta.
Su gran preocupación fue el hombre. Mediante la deformación de cuerpos y objetos proponía reflexiones sobre la condición humana, muchas veces asociadas a las ironías y paradojas de la identidad nacional o la desigualdad social, constituyéndose como un referente nacional de la denuncia a través del arte.