Estados Unidos demanda a Live Nation por supuestas infracciones contra monopolio

El Departamento de Justicia de EE.UU. y casi 30 estados demandaron a Live Nation Entertainment Inc. tratando de obligar a la empresa a vender el gigante de venta de entradas Ticketmaster.

En una demanda presentada el jueves en un tribunal federal de Nueva York, las autoridades antimonopolio alegaron que Live Nation y Ticketmaster monopolizaban ilegalmente el sector de los eventos en directo mediante diversas prácticas anticompetitivas. Entre ellas se incluyen el bloqueo de locales en contratos exclusivos a largo plazo y las represalias contra rivales y locales que buscan alternativas.

La demanda fue publicada por primera vez por Bloomberg.

Live Nation controla más de 265 salas de conciertos en Norteamérica y gestiona más de 400 artistas musicales, según el Departamento de Justicia. En conjunto, Live Nation controla al menos el 80% de la venta de entradas para conciertos en las principales salas. El Departamento de Justicia dice que eso ha llevado a los fans a pagar más en entradas porque "no hay otras opciones".

Las salas de conciertos temen perder conciertos e ingresos si no trabajan con Ticketmaster, según el Departamento de Justicia.

"Es bien sabido en todo el sector de los conciertos en directo, como resultado de la conducta histórica de Live Nation y exactamente como Live Nation pretendía, que elegir ticketers distintos de Ticketmaster conlleva un enorme riesgo y dolor financiero", afirma el Departamento de Justicia en la demanda.

La demanda es el cuarto caso importante de monopolización que persigue la unidad antimonopolio del Departamento de Justicia, junto con los casos gemelos contra Google de Alphabet Inc. y una demanda presentada a principios de este año contra Apple Inc.

Un grupo bipartidista de estados y territorios se unió a la denuncia, incluidos Texas, Florida, California, Nueva York y Washington DC.

Ticketmaster, la mayor empresa de venta de entradas de EE.UU., se fusionó con Live Nation, el mayor promotor de conciertos, hace 14 años tras una larga investigación antimonopolio. El Departamento de Justicia exigió a la empresa combinada que se comprometiera a no vincular sus servicios ni tomar represalias contra los locales que cambiaran de promotor o de servicio de venta de entradas.

En 2019, el Departamento de Justicia alegó que la empresa había incumplido esa promesa y llegó a un nuevo acuerdo que imponía un monitor externo para garantizar el cumplimiento e investigar cualquier otra disputa.

El Gobierno de Biden abrió una nueva investigación antimonopolio sobre la empresa, que ha suscitado un gran interés público después de que Ticketmaster desbaratara la demanda masiva de entradas de Taylor Swift en 2022.