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Dilma Rousseff recibirá a líderes de 12 países en el partido inaugural

Paula Medina

Portavoces de la cancillería brasileña confirmaron que al menos 12 dirigentes internacionales acompañarán hoy a la presidenta, Dilma Rousseff, a presenciar el partido inaugural de la Copa del Mundo.

El Ministerio de Relaciones exteriores precisó que en Sao Paulo estarán los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Chile, Michelle Bachelet; Ecuador, Rafael Correa; Paraguay, Horacio Cartes; Uruguay, José Mujica, y Surinam, Desi Bouterse.

Antes del partido, Rousseff ofrecerá un almuerzo a todos los mandatarios extranjeros y en el palco de autoridades junto a la presidenta brasileña y al primer ministro de Croacia, Zoran Milanovic estarán: el presidente de Angola, José Eduardo Dos Santos; Gabón, Ali Bongo; Ghana, John Dramani Mahama; y el emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Zani.

Este almuerzo, según el ministro de Relaciones Exteriores chileno, Heraldo Muñoz, es simbólico porque “los derechos humanos son fundamentales para ambos Gobiernos, ya que Brasil fue gobernado por regímenes militares entre 1964 y 1985, mientras que Chile vivió bajo la dictadura del general Augusto Pinochet de 1973 a 1990”.

Para el resto de partidos del Mundial de Fútbol, otros líderes también han anunciado que viajarán a Brasil para apoyar a sus selecciones. Entre ellos figuran la canciller alemana, Ángela Merkel, el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden y los presidentes de los países Bric.

A estos encuentros, que varios medios de comunicación ya han denominado como el ‘Mundial de la diplomacia’, también se unió el presidente ruso Vladimir Putin, el de China, Xi Jinping, y el cubano Raúl Castro.

Incluso, el gobierno brasileño ha confirmado que tanto a ese almuerzo como al partido inaugural asistirá el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Por ahora se espera que la reunión de los altos mandatarios sea productiva para resolver temas relacionados con protestas y la finalización de estadios.

Gobierno está atento a prevenir protestas
La policía brasileña teme que las protestas callejeras antes del partido inaugural del Mundial de Fútbol en Sao Paulo deriven en violencia, pues reportes de inteligencia indican que cientos de manifestantes intentarán bloquear las calles que conducen al estadio. La policía ha usado grabaciones de llamadas telefónicas y publicaciones en redes sociales para detectar movimientos en el partido que Brasil disputará frente a Croacia, y que atraerá a 62.000 espectadores, entre ellos líderes de la FIFA y cerca de una decena de jefes de Estado.