El club de fútbol Girona intenta mantener su césped verde en medio de la sequía

El Girona FC está luchando contra un oponente inesperado en su sorprendente éxito cerca de la cima de la liga de fútbol más importante de España: la sequía.

El club catalán que ocupa el segundo lugar, controlado por City Football Group Ltd., propietario del poderoso Manchester City inglés, está a siete puntos del líder Real Madrid. Mientras tanto, Cataluña se ha visto afectada por la sequía más grave jamás registrada, lo que obligó al gobierno local a declarar el estado de emergencia del agua.

La medida afecta a más de 200 municipios, incluida la capital, Barcelona, ​​y restringe el consumo diario de agua por persona, entre otras normas. La Cataluña española tiene un plan de US$2.600 millones para vivir sin lluvia

En consecuencia, los clubes de fútbol solo pueden regar el césped de sus estadios siempre que limiten otros usos. Eso significa que los juveniles del Girona no pueden ducharse después de los entrenamientos y partidos, una restricción que no se aplica a los equipos visitantes, según el presidente del club, Delfi Geli.

También se ha restringido, aunque no del todo, el uso de las duchas en La Vinya, el centro de entrenamiento del primer equipo. El césped del estadio Montilivi, con capacidad para 14.500 espectadores, sólo se riega durante 10 minutos antes de los partidos, ya que la humedad nocturna es suficiente para mantenerlo en buenas condiciones durante los meses de invierno, dijo Geli. Todavía no hay ningún plan sobre qué hacer si la situación empeora durante las estaciones más cálidas.

"El gobierno catalán tendrá que decirnos qué hacer, pero regar un césped de fútbol es un aspecto insignificante de un problema mucho mayor", afirmó Geli. "Por el momento, sólo esperamos que llueva".

El agua bombeada desde un pozo está ayudando a mantener el césped de Montilivi en perfectas condiciones, añadió. Aún así, la última sesión de entrenamiento antes de los partidos en casa ya no se lleva a cabo en el estadio (una instalación propiedad del ayuntamiento donde los jugadores no pueden ducharse) sino en la Vinya, donde sí pueden.

Los embalses en toda Cataluña han caído por debajo del 15%, luego de unos 40 meses de lluvias por debajo del promedio y dos años de calor récord. España incluso está estudiando traer agua mediante buques cisterna desde la vecina región de Valencia. La situación ha llevado a Cataluña a establecer un plan de 2.600 millones de euros (US$2.900 millones) para vivir sin lluvia para 2030, a medida que el calentamiento global hace que las sequías en el futuro sean más comunes.