Ocio

El planeta está de moda

Clara Estrada

Cada vez son más y más los productos de belleza, de cuidado para la piel y de cuidado para el pelo, con los que me encuentro en el mercado y que hacen conciencia acerca de la importancia de usar insumos que causen el menor daño posible al planeta.

Ser verde entró como una moda y aunque muchos refunfuñen y digan que qué horror que solo caen en cuenta del planeta porque es una moda, pues tengo para decirles que si quiera, aunque sea de esa manera, estamos cuidando nuestra tierra. Y que el esfuerzo, por mínimo que parezca, seguro hace algo por cuidar el lugar que habitamos.

Afortunadamente la industria cosmética está fabricando cada vez con mayor frecuencia productos que tienen como base componentes naturales, y cada vez se ven menos los conservantes y demás químicos que terminan por perjudicarnos.

La próxima oportunidad que tenga para comprar cremas, por ejemplo, échele ojo y busque el sello que diga “no testeado en animales”, y procure también usar los que vienen en envases hechos con material reciclado.

Es muy agradable ver cómo la naturaleza y lo que de manera responsable podemos usar de ella resulta ser más beneficioso para todos.

Buscando y haciendo uso de recetas caceras, encontré que si lo que quiere es regenerar la piel, usted mismo puede fabricar aceite de zanahoria; por su alto contenido de vitamina A ayuda a cumplir ese cometido con nuestra piel. Y si lo que quiere es evitar que le salgan arruguitas, el aceite de caléndula aparte de servir para los labios, en la cara hace maravillas. Eso sí, aplíquesela con la luz apagada, no vaya y sea que su vecino o vecina de cama se asuste al ver semejante brillantez.

El continuo uso de productos verdes, incentiva a que más casas de belleza adapten su producción a prácticas verdaderamente eficaces para nuestro entorno, y que le aporten a la naturaleza sin dejar de cumplir con sus objetivos.

Hay expertos en medio ambiente que aconsejan varias prácticas, unas polémicas de las que muchos medios han dado cuenta y otras con las que sí nos sentimos afines a poder realizar.

Busque y acomódese a lo que no lo agreda, pero que tampoco agreda a su planeta.