Humo Negro, dos años de platos que experimentan y barra de investiga
viernes, 11 de agosto de 2023
El restaurante local apunta a un menú experiencial y además se enfoca en resaltar los ingredientes colombianos en sus platos
Joaquín M. López B.
Una casa negra y esquinera en Chapinero pasó, hace dos años, de ser un punto con una tienda de barrio y una calle vacía al lugar que propicia una fila de carros que, semana tras semana, llega hasta el lugar para entender qué tipo de cocina es la ofrece Humo Negro, que se hizo famoso por lo que sirve.
A esa vieja fachada llegaron en 2021 Jaime Torregrosa, uno de los cocineros más disruptivos de la sazón criolla y Manuel Barbosa, quien le acolita la creatividad y el color en los platos, cuidando además la barra, desde donde resalta especialmente el whisky o el mezcal.
Con esta unión premeditada nació este restaurante, que tiene negras las paredes y que sirven como fondo para resaltar los matices de sus platos: el verde intenso de una manzana o los tonos propios de un palmito a la parrilla.
Jaime, dice, entendió que su cocina, como él, debe ser algo loco, por eso el menú no es para quien busca comer una cena tradicional, “para eso está la G”, sino para los que necesitan una explosión de sabores o quieren descubrir otras formas de llevar a la boca una entraña de res, un cangrejo o su erizo de mar.
¿Qué es este o aquel plato? Eso es lo que le preguntan a los meseros cuando presentan el menú, uno que ya cambió casi por completo y que apunta a ser experimental por medio de esta onda culinaria del ‘shared plate dining’, que busca reunir a las personas para compartir, para que entre todos descubran.
Esto no solo le ha gustado al comensal, sino que también los llevó a tener una silla entre el capítulo de América Latina de The World’s 50 Best Restaurants, en donde hacen pinos para la edición 2023. Humo Negro pasó de ser solo un restaurante su primer mes de apertura a un lugar de experiencias y técnica. Los extranjeros que llegan a Bogotá los buscan e incluso, cocineros premiados de todo el mundo planean sus cenas a cuatro o más manos para prender el fogón en uno de los espacios que se enfoca en resaltar los ingredientes colombianos.
Mini taiyaki
Uno de los platos que ha evolucionado desde el comienzo del restaurante y que destaca entre los visitantes recientes es el mini taiyaki, croquetas de papa rellenas de un sofrito de algas marinas y una crema agria de hoja de coca con lo mejor del diseño japonés.
Aperitivo del Pacífico
El aperitivo del Pacifico hace un recorrido por el concepto e ingredientes de esa región colombiana. El coctel con el que empieza refleja un negroni de viche, y los snacks de bienvenida son la ensalada líquida, galleta de tomates y carantanta con alcaparras locales.