Ideas para innovar a la hora del desayuno

Los expertos recomiendan utilizar un mínimo de quince minutos para desayunar en una atmósfera tranquila y relajada, pero lo ideal es tomar al menos el 30% del aporte calórico que necesitamos en toda la jornada para tener un ‘día de reyes’.

Será por ello que algunas culturas han hecho de este plato un verdadero manjar que combina frutas, carnes, huevo y hasta legumbres.

La combinación de pequeños bocados de sal, como lo es una fina tocineta, con la dulzura de un juego de naranja, aparte de deleitar, proporciona diversos nutrientes al organismo. Los nutricionistas aseguran que debe haber un ‘equilibrio en el consumo de alimentos’ a fin de evitar enfermedades vasculares y la temible obesidad.

Aquí le proponemos algunos de los desayunos más completos, Estos platos resultan perfectos para cargarse de energía desde primera hora. Si opta por prepararlos, le será muy fácil, pues los ingredientes los consigue en cualquier supermercado, además no le toma mucho tiempo.

Estilo ibérico
Basado en la dieta mediterránea, se trata de uno de los desayunos más saludables. Un café, solo o con leche, acompañado de una rebanada de pan tostado, tomate triturado o restregado, un poco de aceite de oliva virgen extra y jamón serrano. Incluye también algo de fruta, su preferida. El zumo de naranja es un clásico, aunque también puede ser un poco de macedonia o membrillo con un poquito de miel. Que no falte un vaso de agua mineral. Da un buen aporte de calorías.

Con mucho charm
¿Quién no recuerda a la estilosa Audrey Hepburn comiendo un croissant delante del escaparate de Tiffany’s en ‘Desayuno con diamantes’? En un buen desayuno francés no puede faltar un panecillo dulce, ya sea un croissant, un brioche, un pan de pasas o incluso un crep, acompañado de chocolate a la taza o un cafe au lait. Todo ello, envuelto en rica mantequilla del tiempo y mermeladas y compotas de frutas. Atrévase a probar esta combinación, especial para fanáticos del dulce.

El perfecto English Breakfast
En el desayuno británico es imprescindible un té negro para comenzar el día, que se acompaña de huevos fritos, revueltos o escalfados, una rebanada de pan tostado, alubias, tomate natural pasado por la plancha y champiñones. Para los más necesitados de energía, se añade jamón, bacon frito o salchichas asadas. Para terminar, cereales de leche o porridge (avena cocida con leche caliente azucarada) y un zumo de naranja.

American way of life
Este es uno de los desayunos más elaborados y con más aporte proteínico. Además del café, la leche o el té, incluye siempre huevos, ya sean revueltos, al agua, en tortilla, fritos, solos o con verduras. Las salchichas o el bacon tampoco faltan. El punto dulce lo añaden unos muffins, goffres o hot cakes con jarabe de arce, maiz o miel y un batido de frutas o yogur con cereales. Si desea también puede usar mermelada o mantequilla de maní según su gusto. La versión evolucionada del tradicional de todos los días.

Comienzo continental
Un clásico de los desayunos y uno de los más variados. Un café espreso o chocolate a la taza, un zumo de naranja y pan con mantequilla y mermeladas.

A ello se une algún panecillo dulce o unas galletas, cereales con yogur y una pieza de fruta. Añadimos proteína con un poco de jamón cocido y queso fresco. Este plato se convierte así en un complemento ideal para recargarse de energía y empezar una jornada laboral, combinado lácteos con proteínas y un poco de grasa.

La opinión

Francois Cornelis
Chef de la Cigale
“El desayuno es uno de los alimentos más importantes del día. Se deben saber combinar ingredientes que aporten energía, y a la vez resulten agradables para el colmensal”.