La moda de Versace seduce a fondos y al capital riesgo

La firma italiana de moda Versace se encuentra en la recta final para vender una participación minoritaria del 20% y en la puja ha conseguido seducir a fondos y al capital riesgo. A lo largo de esta semana, la compañía ha recibido ofertas formales de la estadounidense Blackstone, la británica Permira, las firmas italianas Clessidra y FSI, Qatar Holding y la francesa Ardian, segregada de AXA, según el diario The Wall Street Journal.

Goldman Sachs y Banca IMI, asesores de Versace en la operación, están estudiando las ofertas recibidas y seleccionarán las mejores para presentárselas a la familia propietaria de la firma de moda en las próximas semanas. Las fuentes consultadas indicaron que el proceso llevará aún algún tiempo y añadieron que no se ha fijado una fecha límite para tomar una decisión.

Las ofertas por el 20% de Versace rondarán los US$1.360 millones, deberán dejar el proceso creativo de la firma en manos de la familia y contribuir a un plan estratégico de la empresa que ya está en marcha. El objetivo de los dueños de la empresa italiana es obtener fondos para financiar su crecimiento, pero sin perder el control.

En los últimos años varias firmas de moda italianas como Bulgari, Loro Piana y Pomellato han sido adquiridas por gigantes del negocio del lujo como LVMH y Kering (antigua PPR). Versace, que no descarta salir a bolsa en un par de años, se ha fortalecido desde la llegada como consejero delegado de Gian Giacomo Ferraris en 2009. El grupo, que estuvo a punto de suspender pagos en 2004, ha elevado las ventas más del 50% entre 2009 y 2012. Ferraris ha recomprado algunas licencias, redujo la plantilla de Versace en un 25% y relanzó su principal marca.

Asia y Latinoamérica La firma italiana de moda, que quiere impulsar su crecimiento en Asia y Latinoamérica, obtuvo una cifra de negocio de 409 millones de euros el año pasado, con un resultado bruto de explotación de 70 millones. La familia, incluida Donatella Versace, la principal diseñadora de la empresa desde la muerte de su hermano Gianni Versace, en 1997, ultima la entrada de un socio financiero para ganar músculo y hacer realidad su potencial de crecimiento.