La ropa cómoda, ‘genderless’ y sostenible será la tendencia para lo que resta del año
lunes, 18 de abril de 2022
Se espera las prendas para estar en casa convivan con las colecciones elegantes del retorno a la oficina. El consumo aumentaría 5%
La ‘nueva realidad’ de la que tanto se hablaba en pandemia ya es un hecho y, así como las videollamadas han aprendido a convivir con las reuniones presenciales, también la ropa para estar en casa lo ha venido haciendo con la etiqueta de las oficinas.
Yuly Giraldo, capacitadora de consultores de imagen, explica que, luego de superar el encierro, la moda se ha volcado a diseños en los que se mezcla la comodidad con prendas y accesorios llamativos.
“Ya no es esa comodidad de estar en sudadera, tenis, sino que vemos una explosión de glamour. Esto se ve por ejemplo en el tema de los colores y su combinación; violeta con naranja, naranja con verde, fucsia”, señala la experta.
En cuanto a siluetas, Giraldo explica que las prendas oversize también han ganado protagonismo (por la misma línea de la comodidad) así como los flecos y las transparencias.
Dentro de esta transformación de las tendencias se ha visto, por ejemplo, el uso de zapatos bajos en lugar de tacones; omitir las corbatas o usar estampados más atrevidos para ir a trabajar.
Pero ¿qué tanto le está invirtiendo el colombiano a su guardarropas? El último informe del Observatorio de Moda de Inexmoda reporta que en 2021 el consumo en moda aumentó 21% versus 2020, al pasar de $22,9 billones a $27,7 billones y 5% frente a 2019 cuando la cifra fue $26,4 billones.
Este año la expectativa es que el gasto aumente otro 5% versus 2021 y supere los $29 billones, lo que según Juan Fernando Loaiza, especialista en investigación económica de Inexmoda, estará jalonado por “el regreso a las calles, a la presencialidad, al turismo, a los festivales, al estadio y a las actividades de entretenimiento”.
Lo que pide el cliente
Además de mantener el aire de comodidad, las marcas han respondido a los nuevos valores del consumidor, como la sostenibilidad y la inclusión en las prendas.
Fibras con PET reciclado, algodón orgánico, prendas a base de cáñamo, seda de barro y cuero vegano, son algunos de las prácticas usadas por las marcas en la actualidad.
Para Giraldo migrar a estas nuevas tendencias, además de un tema de responsabilidad empresarial, también es una oportunidad para las marcas de captar nuevos públicos como los ‘millennials’ o ‘centennials’ que en su experiencia son los que más atención prestan a estos rubros.
“También vemos el tema de la inclusión en la que los hombres están usando prendas que solían usar las mujeres como las faldas y también una las tallas, ahora los diseños son para cualquier tipo de cuerpo”, dijo.