Los consejos que dan profesionales en el proceso de construir una vivienda a su medida
jueves, 2 de septiembre de 2021
Expertos explican cómo es el proceso desde la adquisición de un lote, hasta la decoración interior de una vivienda según sus expectativas
Comprar una casa es una de las principales metas de una persona, sin embargo, personalizarla a su estilo y tendencias es un gusto que menos se pueden dar, por lo que es un proyecto gratificante para quién lo logra. En LR le damos cinco consejos para que este proceso no se vuelva un dolor de cabeza.
El primero es elegir dónde se construirá. Según FincaRaíz, durante el primer trimestre de este año, aumentó 20% las búsquedas de lotes rurales en comparación a 2020, lo que muestra la tendencia de buscar zonas para construir una vivienda que conecte con la naturaleza.
En este punto, el especialista en derecho inmobiliario de CastrOrtizGómez, Rafael Gómez, recomendó analizar que el lugar tenga “vías de acceso, acceso fácil a servicios públicos, hospitales cercanos, y sobre todo que se adapte a sus necesidades y estilo de vida”.
Al tener el lugar, en segundo lugar, se debe tener la resolución de urbanismo que indique que es apto para construir una vivienda, la licencia de construcción y un certificado de libertad y tradición.
Al igual que es relevante “hacer una verificación de toda la historia del inmueble, es decir, conocer sus licenciamientos o los certificados del predio”, afirmó Gómez, para lo que se debe contar con asesoría en elaboración del contrato de compraventa.
Tercero, y después de que ya tenga el área donde se va a construir, se debe iniciar el proceso de diseño, ya sea con un arquitecto independiente o con una firma, lo que podría costar entre $5 y $8 millones en el primer caso o entre $11, $16 o $20 millones con una empresa, explicó sobre los promedio del mercado, el arquitecto Carlos Andrés Chia, CEO de Forttech.
El profesional indica que se debe iniciar por entender las expectativas del cliente, si es una sola persona o lo que espera cada miembro de un grupo familiar, quienes normalmente ya tienen claras preferencias. “Ahí está la responsabilidad de nosotros como diseñadores, de poder unificar todos los gustos y requerimientos”, explicó Chia.
Con esta información se hace un ‘sketch’ inicial esquemático y luego un programa arquitectónico que se desarrolla en un taller de diseño, para a partir de este crear propuestas que se acerquen a lo que el cliente tiene en mente, las cuales son presentadas en renders con la ayuda de realidad virtual y aumentada.
Después de todo el proceso, que puede tardarse tres meses, un cuarto punto es calcular los elementos técnicos y realizar el presupuesto de construcción. Además, decidir si lo desarrollará con la misma empresa de diseño o una constructora aparte; en ambos casos toca analizar el punto de los acabados. Chia indicó que después “se habla de un interiorista o un arquitecto enfocado en diseño interior que se encarga de luces, materialidad y de hablar de los sentidos”.
En este sentido Ómar Castaño, arquitecto y diseñador especializado en interiores, explicó que ahora en las construcciones se tiende a usar materiales reciclados y naturales tanto en decoración exterior como interior, y en este momento por la pandemia “se ha generado una tendencia en la que se busca una conexión con la naturaleza desde los hogares”.
Este sería el último aspecto, que se recomienda ir implementando de forma transversal según el estilo de preferencia y necesidad de quien habitará el espacio.