Mambo y la constructora Coala, unidos para crear un museo expandido en Bogotá
miércoles, 13 de diciembre de 2023
La unión entre la arquitectura y el arte no solo encarna una manifestación de creatividad, sino también un compromiso conjunto hacia la revitalización urbana
Con el objetivo de difundir el arte en espacios públicos y ampliar el impacto del Museo de Arte Moderno de Bogotá (Mambo), la colaboración entre el Mambo y Constructora Coala se materializa en un proyecto de gran relevancia: la transformación de la fachada del proyecto arquitectónico Art72, ubicado en la capital colombiana.
Esta acción representa un pilar esencial de la visión de Mambo Extramuros, que se propone ir más allá de los confines físicos del museo, extendiendo el conocimiento artístico a distintos rincones de la ciudad con el fin de promover vínculos y conexiones cognitivas renovadas.
La unión entre la arquitectura y el arte no solo encarna una manifestación de creatividad, sino también un compromiso conjunto hacia la revitalización urbana y la redefinición de la interacción con el entorno. "Art 72" representa una iniciativa orientada a dotar a la ciudad de una obra de arte urbana que enaltezca el contexto artístico de la zona. Juan Alberto Lopera, gerente general de Coala Arquitectura y Construcción, enfatizó: "Esperamos seguir impulsando el arte y la cultura mediante nuestros proyectos en diversas áreas de la ciudad".
Artistas destacados y el proyecto seleccionado
El equipo curatorial del Mambo ha elegido a cinco artistas destacados de la escena plástica colombiana: Alberto Lezaca, Jessica Mitrani, Julián Burgos, María Isabel Rueda y Beatriz Olano.
Tras un minucioso análisis de las propuestas presentadas, María Isabel Rueda, reconocida artista, curadora y gestora cultural originaria de Cartagena, fue seleccionada para llevar a cabo esta transformación en colaboración con Constructora Coala y el Mambo. Su propuesta, inspirada en la exuberante vegetación selvática, creará una obra que fusiona la fauna y la presencia humana en un paisaje que, a pesar de ser ajeno al entorno citadino, es una parte esencial del ecosistema colombiano. Rueda busca así superponer el contexto urbano con el exuberante paisaje tropical, planteando nuevas perspectivas para percibir y entender el entorno cotidiano.